ᑕᗩᑭÍTᑌᒪO 36

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Ichigo caminaba con tranquilidad por los pasillos de Las Noches. Se le veía relajado y caminando con soltura, buscando encontrar las marcas en la pared dejadas por él mismo hace pocos días.

Ese semblante relajado era el reflejo de sus propios pensamientos, quería mantenerlos lo más claros y serenos posibles después de lo que había conseguido hace no mucho tiempo y que le sería de mucha ayuda, además de lo que tendría que hacer ese mismo día por la tarde.

Al caminar otros trozos más, finalmente dió con dichas marcas y enseguida empezó a seguirlas, ya una vez encontraba una era imposible perderse por tan oscuros y confusas que fueran Las Noches, no tardó mucho en acostumbrarse a ellas, aunque la oscuridad nunca le había terminado de gustar, se le hacía algo... tétrico.

...

Teniendo su mirada plasmada en la pared, concentrado siguiendo las guías, no sé percató hasta último momento que unas personas estaban fuera de su habitación y parecían estar esperándolo, se detuvo un momento. "Maldición, me concentré tanto que no pensé qué esto podía pasar, espero que no sea lo que creo que es..." pensó mientras fruncía el cejo.

Decidió terminar de acercarse, además, ya había sido visto por dichas personas, así que no tenía caso huir.

"Vaya, así que por fin de dignaste a aparecer, pensé que nunca lo harías" dijo con algo de reproche Loly al verlo llegando. Ichigo se detuvo cerca de su persona, resopló ante el llamado de atención, creyó que de algún modo lo merecía.

"Ichigo, ¿Dónde estuviste todo este tiempo? pensamos que te había pasado algo y nos preocupamos" preguntó la chica rubia de su Fracción.

"No es nada malo, Menoly. Solo tenía un asunto que resolver, por eso les dije ayer que estuvieran con Halibel, ya que no sabía exactamente cuánto tardaría, aunque de todas formas lamento no haber dicho que todo se alargaría de esta manera. Les debo una disculpa, y creo que ha ustedes también, ¿No?" preguntó Ichigo al ver las otras presencias.

"Tch, a mí no me importa, puedes hacer lo que quieras" negó molesta Apacci mientras se cruzaba de brazos. Sun-Sung y Milarose rieron por dicha acción.

"No te preocupes Ichigo, de todas formas es difícil de pensar que a alguien como tú le pase algo malo. Pero si gustas, tus disculpas son aceptadas con gusto, y no solo hablo por mi cuando digo esto" afirmó Sun-Sung.

"Tiene razón, así que no le hagas caso a la estúpida de aquí" dijo Milarose señalando a Apacci, esta torció la boca con molestia cuando fue nombrada. "Aunque no lo creas y diga lo contrario, era de más preocupadas por tí junto con-"

"¡I-Ichigo!" lloró Lilinette desconsoladamente colgándose del cuello de Ichigo.

"Junto con Loly, Meloly, y por supuesto, esa enana" terminó ahora sí Milarose con simpleza.

"Ya ya, cálmate un poco Lilinette, estoy bien" la calmó Ichigo. Esta como por arte de magia lo hizo, parecía haberse calmado, hasta que el Espada sintió una patada en la pierna, propinada por la misma niña que lo miraba... ¿Furiosa?

"Lilinette, ¿Qué se supone que haces?"

"Dándote una lección, idiota" contestó mientras lo seguía pateando, aunque naturalmente no sentía dolor, algo se le pasó por la mente.

"Creo que ahora sé un poco de lo que pasa casi a diario... definitivamente no me gustaría estar en sus zapatos" pensó Ichigo con diversión recordando a alguien muy perezoso que conocía. Lilinette ya se había cansado de tallarle la pierna con la propia y se sentó agotada.

ᑎOᑕᕼᗴ ՏIᑎ ᒪᑌᑎᗩDonde viven las historias. Descúbrelo ahora