Bajo un despejado cielo nocturno, en un no tan humilde pero calido castillo, vivía una hermosa princesa de cabellos dorados. Todos la conocían por ser el alma más bondadosa de todo el reino, portando siempre una dulce y tierna sonrisa que alumbraba los corazones de quien sea que la viera tan solo pasar.
Su padre, el rey, quien era una persona mala, cruel y ambiciosa, al enterarse que muchos jovenes del reino se habían enamorado de su hija, se llenó de celos y la encerró en la torre más alta del castillo para que nadie pudiera apartarla de su lado. Pero éste no contó con que la princesa ya se había enamorado del soldado más valiente, inteligente y humilde de todo el reino, era una persona muy amada entre todos, principalmente en el pueblo, por ser alguien de buen corazón, y este soldado también amaba a la princesa con la misma intensidad.
Una noche de luna llena, cuando la nieve caía a montón, el pequeño soldado, al saber que su amada se encontraba cautiva fué a su rescate. Pasó por muchos peligros enfrentandolos con solo su espada. Pero gracias a lo fría que era la noche y porque justo en ese momento se realizaba una festividad en el castillo pudo llegar sin ser visto a donde estaba la princesa quien lloraba por no poder ver al amor de su vida.
Al llegar a la cima de la Torre, ambos volvieron a encontrarse y felices por volverse a ver se dieron un tierno beso, pero no contaron con que el rey los observaba escondido entre los muros. Y este salió amenazando con su espada al amante de su hija obligandolo a que se descubriera el rostro que no se podía ver en la oscuridad y pro la capa que éste usaba. El caballero así lo hizo, bajó su capucha negra dejando salir una larga y plateada cabellera que flameó en el aire bajo la luz de la luna. Una bella dama con armadura se hallaba frente al rey con una firme postura que reflejaba valor. Amargo y aterrado el tirano no dudó en lansarse a matar a la joven que había robado el corazón de su hija, pero no contó con que la princesa la defendería sacando su propia espada escondida entre sus faldas. Ambas se enfrentaron contra la persona que las había separado y se oponía a muerte a su amor. Fué un duelo de sangre y lágrimas, y en un mal movimiento el rey cayó al precipicio de la ventana donde el océano se alzaba entre las rocas. Y con eso se dió fin a la batalla.
Por el bien de ambas y generar paz, esa misma noche la princesa anunció a todo el reino que unos vandidos habían asaltado el castillo acabando así con la vida de su padre, pero también contó la verdadera historia de su ausencia en el pueblo, de como su propio padre la había tenido encerrada, y como su guardia más leal le había salvado la vida de ser casi asesinada por los vandidos.
Y el pueblo la entendió, se emocionó con el regreso de su princesa, y felicitaron a alabanzas al caballero que la había salvado, la bella dama de cabellos plateados, y cuando la nueva sobera del Reino anunció su compromizo con su salvadora, el pueblo no dudó en apoyarlas pues creyeron que era lo más justo y digno que debía hacerse, porque ambas guiarían al pueblo a una era de prosperidad y paz.
La boda fue recordada por siglos como la más bella de todos los tiempos , y en especial la pareja que la conformaban.
Ambas reinaron con sabiduría por décadas, y hasta el día de hoy se recuerda a las dos reinas con amor. La dulce y bondadosa Charlotte y La valiente y generosa Vaggatha.
Fin.
ESTÁS LEYENDO
✨OneShots de Hazbin Hotel ✨
FanficEste libro contiene pequeñas historias ficticias de la serie animada para adultos, Hazbin Hotel, creada por Vivziepop. Estás historias tocan diferentes temas como amor y desamor, también festividades como Halloween y Navidad, y otras son simplemente...