Heather

3 de Diciembre

Recomendación: ver el video antes de comenzar a leer.

(Gavi)

Desperté y abrí los ojos cuando sentí un rayo de luz entrando por la ventana del cuarto del hotel, le he dicho mil veces a Pedri que no me gusta que abra las cortinas cuando estoy durmiendo, pero bueno.

Me senté en la orilla de la cama y revisé mi teléfono, eran casi las 8 de la mañana, teníamos que ir a entrenar porque en un Par de días nos toca enfrentarnos a Marruecos en el mundial de Qatar. La verdad estoy muy nervioso porque si no ganamos ese partido vamos a quedar eliminados del mundial.
Estaba perdido en mis pensamientos cuando sentí que una almohada me pegó directo en la cabeza, claro tenía que ser Pedri molestándome como siempre.

-Estaba a punto de despertarte, ¡Mira esa cara!, parece que alguien no durmió muy bien.

Compartiendo habitación con alguien tan gilipollas, ¿quien coño va dormir bien?.

-¡Tranquilo hombre!. Qué te parece si te levantas de esa cama, tomas una ducha y desayunas algo, pero rápido porque tenemos entrenamiento en 20 minutos.

Me levante y fui directo al baño para tomar una ducha rápidamente, la habitación estaba sola así que aproveché para vestirme. El cielo estaba nublado pero decidí no ponerme ningún suéter ya que iba a entrenar e iba a sudar así que en realidad no lo necesitaba.
Salí de la habitación y Pedri ya tenía listo mi desayuno, una tostada con huevos y un vaso de jugo de naranja. Le agradezco y empiezo a comer.

-"Apúrate niño que ya nos tenemos que ir", me dice Pedri. Estoy comiendo lo más rápido que puedo (le respondo). Tomé el último trago de jugo que le quedaba al vaso, me levanté de la silla y tomé mi maleta deportiva, ya no tenía tiempo ni de recoger mi plato.
¡Listo, vámonos!. Salimos de la habitación y Pedri que venía detrás mío cerró la puerta. Caminamos a paso rápido porque ya nos estaba esperando el chofer afuera del hotel para llevarnos al estadio donde íbamos a entrenar.
Nos subimos al coche, lo bueno es que nos hacíamos solo 5 minutos para llegar.
Llegamos justo a tiempo, ya estaban calentando así que rápidamente dejé mi maleta en las gradas y me acerqué para calentar con los demás chicos.

Llevábamos como 30 minutos en la cancha y el entrenador nos dijo que podíamos descansar, me acerqué donde dejé mi maleta con intenciones de sacar mi botella de agua cuando recordé que no me dio tiempo de guardar mi botella, suspiré cansado y me acordé que cuando entré al estadio vi una mesa con botellas de agua para los jugadores. Así que me dirigí para allá, cuando estaba a punto de llegar vi cómo se abrían las puertas del estadio y estaba entrando el equipo de la selección de Polonia.

Lo vi, vi al polaco que me traía loco. El mismísimo Robert Lewandowski. Me quedé ahí parado sin moverme, mi cuerpo no reaccionaba delante de tanta belleza, pasó al lado de mi y me saludó ya que ambos jugamos en el club Barcelona pero ahora él está jugando con su país natal. Solo pude sonreí y levantar la mano a forma de saludo.
Por suerte nadie me vió, porque se hubieran burlado de mi por mi saludo tan patético. Tomé mi botella de agua y huí de ahí.

Seguimos con el entrenamiento y el clima empezaba a empeorar, volteé mi mirada hacia el cielo y vi como este estaba casi negro, por el viento que empezaba a sentir supuse que llovería muy pronto.
Pasados 5 minutos sentí como unas gotas empezaban a caer en mi rostro, ya casi terminábamos de entrenar así que no importó que la lluvia se hiciera presente.

Terminé empapado por la lluvia y gracias a que salí rápido del hotel y no revisé siquiera que traía en mi maleta. Solo traía un pantalón, ropa interior, tenis y un par de calcetas. No tenía siquiera una playera.

Me metí a los vestidores para ducharme, me vestí con la poca ropa que traía, me estaba poniendo los tenis cuando vi a Lewandowski parado enfrente mío.

-Hola, disculpa, venía al baño, pensé que no había nadie aquí.

No te preocupes ya me vestí bueno casi, solo que me falta la playera que se me olvidó en el hotel. Es que ya venía con prisa y no me di cuenta que no traje todas mis cosas.

Lewandowski se quedó viendo el torso desnudo de Gavi, en todo este tiempo que había compartido con él nunca lo había visto así.
Gavi notó la mirada de Robert en él y se sonrojó.
Lewandowski reaccionó, -"como vas a andar así, te vas a resfriar, toma" se quitó su suéter para dárselo al pequeño parado enfrente de él.

Muchas gracias Lewy, mañana mismo te lo entrego.
Gavi se puso el suéter y notó que le quedaba un poco grande, ya que el polaco es más alto que él.

-No me agradezcas pequeño, de echo se te ve mejor a ti que a mí.

"Gracias" le respondió Gavi con una sonrisa boba en la cara. Era sorprendente como ese hombre con tan solo unas palabras lo tenía así.

Se quedaron varios segundos viéndose mientras sonreían.

Bueno... me tengo que ir.

-y yo tengo que pasar al baño.

¿Mañana estarás en el hotel?, para que te entregue tu suéter.

-Si, mañana me buscas en mi habitación, como a las 8pm.

Vale entonces te veo mañana, adiós.

-adiós pequeño, cuídate.

NOTA:
Qué tal, si les gusta la idea de la historia háganmelo saber, voten para que me siga inspirando a terminar esta historia que la verdad se va a poner muy buena.

NOTA 2:
¿Notaron las referencias a la canción? 👀