-Aqui estamos. ¿Qué querías decirme Steve?- dijo Maria un poco exaltada.-Mm..- se aclaró la garganta y dijo -Agente Maria Christina Hill, sé que en este momento no tienes tiempo, que pasamos cosas muy difíciles, nos equivocamos muchas veces, pero- se aclaró una vez más la garganta -Nada me haría más feliz que convertirte en mi esposa, así que ¿Quieres ser mi companera?-
Maria no podía creer lo que estaba diciendo, pero por el bien de los dos decidió decir la verdad.
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ALTO , ALTO.
Pero, ¿cómo llegamos hasta aqui? empecemos de nuevo...Todo comenzó tiempo después de la desaparición de SHIELD: en una búsqueda desesperada de los agentes por encontrar un nuevo empleo y continuar con sus vidas, aquí es donde encontramos a nuestra querida Agente Hill, cayendo en las manos de la empresa del millonario Tony Stark.
Un día cualquiera, Maria decidió olvidarse de todo y continuar con su vida, como si aquella aventura con el soldado de invierno nunca hubiese existido.Sabía que le costaría trabajo olvidar a SHIELD, al Director Fury, a sus companeros, pero sabía que lo que había hecho el Capitán Ameérica era lo mejor que podía haber pasado: normalmente no creía eso de las personas, pero ¿cómo ignorar el hecho de que una persona, sin saber nada de los demás, les abrió los ojos?, buscaba sólo lo mejor para la humanidad. Eso era algo que no todos hacían, estaba segura que ella sería capaz de hacer lo mismo, pero nunca había conocido a nadie que creyera lo mismo.
Despertó un lunes muy temprano, tomó un bano e inmediatamente fue a su armario, descolgó un vestido negro y unos zapatos del mismo color; cuando terminó se acercó a su tocador y se hizo su típico chongo: no tenía la costumbre de arreglarse demasiado, pero creía que esta cita era lo suficientemente importante para hacerlo. Comenzó con un poco de rubor en los pómulos, un poco de delineador y rimel, dándole una profundidad a esos ojos azules que podían encantar a quien sea y, por último, un labial rojo sangre, terminando de darle a su cara una expresión dura pero hermosa.
Salió de su departamento y subió a su auto. Mientras manejaba pensaba en qué le diría al millonario: repasaba una y otra vez su currículum, las frases, incluso las caras que haría, pero se detuvo un momento y pensó:
-¿Qué estoy haciendo? Es tan sólo Tony Stark- dio vuelta en una glorieta y se estacionó.
Aunque en realidad no sabía quién la entrevistaría.
Al entrar en la empresa la recibió, casi boquiabierto, Happy, el nuevo jefe de seguridad de Stark Industries:
-Agente Hill, la estábamos esperando, ¿gusta que la acompane?
-No, no es necesario, sé donde está la oficina del senor Stark- dijo ella.
-Perfecto, en ese caso siga adelante por favor.-
-Gracias- subió al elevador y marcó el piso 50 de la torre. Salió y se dirigió muy segura hacia la puerta, pidió a la secretaria que la anunciara y alcanzó a escuchar:
-El plan esta listo, no te preocupes Rosalie, déjala entrar- inmediatamente después la secretaria la dejó pasar.
-Rosalie te equivocaste, esta no es la Maria que yo conozco, pero no importa, lo impresionará más.-
-Siempre tan educado Stark, espera ¿A quién impresionaré?-
-Jajajaja, ya verás, sólo espera.- respondió él.
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"Solo era una cita "
RomanceDespues de la desaparicion de SHIELD Maria encontro una nueva manera de ser feliz