How beautiful | Kit + Ty

Capítulo 3

Sometimes I wake up by the door
That heart you caught must be waiting for you
Even now, when we're already over
I can't help myself from looking for you.

—Set fire to the rain by Adele.

TY

Aunque era a voluntad, Ty no podía creer que se estaba preparando para una fiesta. Para un ruido masivo y toqueteos furtivos. Había mejorado mucho con su trato a los demás a través de los años, ahora era capaz de expresar mejor lo que sentía, de mandar mensajes a sus hermanos cuando los extrañaba y de sostener a Julian en brazos el tiempo que su hermano necesitara. El hecho de que tuviera amigos y no solo compañeros de misiones, ya hablaba de lo mucho que se estaba esforzando. Pero no dejaba de ser difícil adaptarse a otros y que nadie lo hiciera a él.

También tenía que ser honesto consigo mismo, la idea de salir a ese sitio había sido tan poco tentadora que había estado a nada de rechazarla hasta que escuchó que había una posibilidad de que Kit estuviera allí. No quería hacerse ilusiones y precipitarse a los hechos, pero podía sentir que algo había cambiado desde la última vez. La seriedad en la voz de Kit y la frialdad en su mirada en Blackthorn Hall no tenían nada que ver con el nerviosismo de esa tarde.

Ty pensaba que quizá, por fin podría perdonarlo.

No había querido presionar más, después del encuentro no había mandado más cartas, ni siquiera para preguntar cómo estaba luego de la desaparición de Mina. Pero había estado atento. Mencionaba a la familia Carstairs en sus cartas a Julian para obtener información, o preguntaba directamente a Dru si había hablado con él. Finalmente su paz había llegado cuando Mina volvió con sus padres y supo, aún a la distancia, que Kit estaba bien de nuevo.

—¿Pensando en Kit?

Aunque las apariciones de Livvy siempre eran espontáneas, Ty jamás se asustaba. Cuando eran niños, había aprendido a reconocer la forma peculiar en que sonaban sus pisadas ya fueran con zapatos o pies descalzos. Ahora se daba cuenta por el ligero cambio de clima, siempre más frío.

—Sí.

No tenía sentido mentirle, además necesitaba pedirle algo en relación al rubio.

—Cuando lo vea —si es que lo veo, pensó— me gustaría estar solo.

A Ty no le molestaba la presencia de su melliza con cualquier otra persona o situación, pero sentía que la necesitaba lejos de Kit. No para siempre, pero sí en ese momento. En la cafetería había actuado como si ella no estuviera allí, y un año antes, la había mirado con desprecio. Sabía que Kit no aprobaba lo que había hecho para tenerla, y que la presencia de Livvy no era su favorita. Si quería acercarse de la mejor manera, era lejos de ella. Además, pensó, tendría más cosas para contarle cuando volviera.

—¿Quieres que me quede aquí? —por su tono la escuchó confundida, dolida, pero entendiendo.

—Puedes venir solo...

—Que no me vea —completó— tranquilo, me perderé entre toda esa gente. Igual, por cómo luces, estoy segura que lo último que hará Kit será verme.

***

El lugar era más ruidoso de lo que esperaba. No había llegado ni a la puerta cuando la urgencia de cubrirse los oídos lo invadió. La vibración se filtraba por sus zapatos, y las luces neon eran tan molestas que se obligó a estar en la oscuridad pegado en una de las esquinas.

Todos sus amigos se habían integrado de inmediato. Gwyn y Aelin estaban bailando muy pegadas en el centro de la pista, Anush estaba bebiendo ya su tercer trago mientras reía con un grupo de completos desconocidos, y había visto a Livvy flotar entre las personas como se imaginaba hubiera hecho de estar viva.