Capítulo 12

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Rosé POV:

Ahora me sentía avergonzada, el café había bajado el nivel de embriaguez de mi cuerpo y podía sentir toda la culpa caer sobre mí. Como una roca creciente encima de la espalda.

–Rosé, sé que quieres hablar con ella y arreglar las cosas pero esa no es la forma... –soltó Miyeon con cansancio, solo asentí– no puedes volver a la bebida y esperar que todo salga bien, nunca ha pasado y no pasará ahora.

Sabía que tenía razón pero no conocía más salidas, sentía que Lisa se alejaba nuevamente de mí y aquello me mataba, la sensación de volver a perderla me aterraba.

–Me sentí tan celosa... –exclamé con tristeza– los ojos de Lisa ya no me ven como antes, no hay ese brillo cada vez que hablábamos ahora toda su atención está en ese tipo –me detuve por la rabia, gruñí de frustración– ¿Viste como se acercó a él? Me rehúso a creer que está enamorada de él.

Miyeon se sentó y me miró, parecía querer entenderme pero sabía que no lo hacía. Su relación con Minnie, la heredera del puesto de Gerente de finanzas de Tailandia, era casi perfecta. Estar cerca de ellas, solo era poner sal a mi herida llamada soledad. Se notaba que el amor estaba entre ellas, Minnie lo demostraba físicamente y solo me hacía sentir peor.

–Me gustaría solo poder hablarle, contar mi lado de la historia –solté con lágrimas que ya no podía aguantar– solo quiero a mi Lisa de vuelta...

Deje que mi amiga me abrazara mientras me consolaba, era lo único que podía hacer ahora.

–¡No te atrevas a tocarme si no quieres una demanda!

Miyeon y yo nos exaltamos al escuchar la voz de Jisoo, nunca terminaba bien las cosas con ella.

–Aléjate de Lisa –soltó con rabia al entrar a la habitación– No tienes derecho de hacerle esto, no volverá a sufrir por tu culpa. Sólo superala.

Siempre tuve la corazonada de que Jisoo la veía como algo más, los recuerdos de nuestra etapa de estudiantes fueron proyectados en mi memoria en cuestión de segundos y no pude contenerme más. Siempre había estado entre nosotras.

–Sé que te gusta Lisa –dije sin miedo y con calma– no intentes esconderlo más.

La mirada de enojo se suavizó por un momento, podía sentir la mano de Miyeon en mi costado, pidiendo que la dejará ir pero no podía. Necesitaba cerrar este problema de una vez.

–Sé que te gusta desde que éramos adolescentes, siempre estuviste a su lado y sé que ella fue la la primera persona que te ayudo en tu vida en Corea pero yo soy a quién quiere. Me eligió a mí por encima de todo...

–Cállate... –dijo con voz gruesa–

–Ella decidió quedarse conmigo y tienes que aceptarlo, ya debes dejar ir tu idea de romance con ella. Está casada ahora y aunque nos duela, debes dejarla ir. Nunca fuiste tú y lo sabes...

–¡CÁLLATE ROSEANNE!

Lo siguiente que sentí fue una cachetada tan fuerte que tuve que sostenerme de mi amiga para no caer al suelo. Miyeon pidió que se calmara, me revisaba pero yo no podía quitar la vista de Jisoo. Ahí estaba mi respuesta, ella estaba enamorada de Lisa.

–Déjala ir –dije una vez más– hacerme problemas y culparme no hará que ella te quiera. Solo logras hacerte daño.

El celular de Jisoo empezó a sonar, ella lo miró y luego nos miró a nosotras. Parecía debatir si contestar o no, por un momento pensé que era Lisa pero apareció Jennie por la puerta siguiendo el sonido del celular.

–Te he estado buscando –dijo suavemente a Jisoo–

Ella revisó la habitación y nos vio. Había una pregunta tácita en sus ojos y solo pude negar. Acaricie mi mejilla adolorida y ella entendió.

El Error Que Nos Separó | ChaelisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora