Capítulo 13

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Lisa POV:

Estaba acostumbrada a estar sola en la clínica, leyendo algún libro nuevo o simplemente viendo las noticias en el celular. Pero ahora que tenía la mano de Frederic en mi espalda mientras él revisaba sus inversiones me sentía nerviosa.

Estábamos esperando nuestra cita con la doctora que ayudará con la inseminación artificial, habían dos pacientes antes que nosotros y eso me daba mucho tiempo para pensar pero a la vez de darle vueltas a un solo pensamiento. Cosa que odiaba hacer.

–¿Estás bien? –preguntó con calma mientras me daba una suave caricia– te siento intranquila y algo temblorosa...

–Estoy bien –dije con una sonrisa– son los nervios.

Él dejó un beso en mi frente y empezó a mostrarme lo que estaba viendo. Las acciones que tenía en Chanel habían subido y eso le generaba más ganancias, estaba feliz.

Pero mi mente no estaba con él...

FLASH BACK

Ya era conocido el lugar para mí, me sentía segura en el lugar y ya sabía la rutina. Sentarme, beber un poco de agua y soltar la catarsis.

–¿Qué sentiste cuando viste a Rosé de nuevo? –preguntó mi psicóloga con calma y mirándome a los ojos– ¿Sigues con el miedo de que vuelva a alejarte?

–Es difícil de explicar –respondí cansada, pensar en ella y el pasado lo hacía– Verla nuevamente fue como traer los malos recuerdos, solo que ahora sé que no fue mi culpa. Pero eso no quita que haya sido una mierda lo que viví –suspiré y ella anotó algo, no le di importancia– Mi mente estaba en dos partes, en la positiva con nuestros recuerdos de la juventud y en la negativa; cuando pasó el accidente y me deportaron.

Mi voz empezó a quebrarse y respiré hondo. Quería hablarlo.

–Fue difícil abrirme a personas extrañas después de lo que pasó con mi padre –solté con enojo– solo tenía a mi madre en ese entonces y cuando la perdí pensé que tendría a las nuevas amigas a las que me aferré. Pensé que tendría a Rosé conmigo porque parecíamos una pareja, nos comportamos como una –expusé con obviedad– pero no fue así. Solo, estuve sola de nuevo.

–Entiendo que hayas sentido la pérdida –explicó con calma– tu trauma fue traído de vuelta al verte sola y es comprensible que no quieras sentirte así de nuevo pero ahora estás confiando otra vez –señaló el anillo en mi mano– has formado un lazo de confianza con tu esposo y eso es un avance. Podrías hacer lo mismo con Rosé, dijiste que te sentiste bien cuando volviste a ver a tus amigas. Jisoo y Jennie, ¿verdad?

–Si, fue un buen sentimiento –aclaré mi voz antes de llorar– pero con Rosé no lo es... simplemente no puedo quitar encima el dolor que tengo por sus actos.

–Tal vez sea bueno que escuches lo que tenga que decir –agregó tomando mis manos– y perdonar, para que pueda sanar esa herida que no te deja avanzar.

Estuve un momento en silencio, ella me dio algunos pañuelos mientras volvía a su lugar. Respiré hondo antes de volver a hablar.

–Decidí tener otro hijo –solté sin mirarla, jugaba con mis manos– siento que Frederic se lo merece, me ha apoyado demasiado y nunca me ha hostigado para tener relaciones con él...

–¿Estás segura de esa decisión? –pregunta ella mirándome nuevamente– Tuviste depresión post parto con tu primera hija. Y te fue difícil crear un lazo los primeros meses –hizo una pausa para escribir– además de tener problemas para relacionarte con el hijo de tu esposo, el mayor.

–Sé que fue difícil pero Frederic no tuvo oportunidad de compartir con Lucas y con Lili apenas pudo disfrutarla porque debía cuidarme también. Nunca pudo disfrutar de su paternidad.

El Error Que Nos Separó | ChaelisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora