Capítulo 26 • Persecución

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Las puertas del lugar se abrieron de par en par cuando Yelena y Kate salieron corriendo de la vieja fábrica a pasos apresurados. Los disparos no se quedaron atrás y los hombres de Fisk salieron detrás de ellas.

—¡Aquí! —exclamó Belova deteniéndose junto a un camaro que se veía cuánto menos costoso.

—¡Oh dios, Clint se va a enojar si se entera! —dijo Kate saltando por encima del capó para cubrirse al otro lado del vehículo.

—¡Pues no le digas y ya! —de un codazo rompió la ventana para abrir la puerta del conducto. Lo primero que hizo al subir fue levantar el pestillo a la puerta del copiloto.

Kate abrió la puerta para cubrirse de las balas, mientras contrarrestaba los disparos con algunas de sus flechas, en lo que Yelena intentaba arrancar el auto

La rubia sentía un fuerte dolor en su costado, al palparse notó que algo de sangre corría por su cintura. Pero no tenía tiempo de vendarse.

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—Deben haber cientos de matrículas que coincidan —dijo Kate tras discutir con Peter sobre la información que habían conseguido.

El castaño lo meditó unos momentos, buscaba alguna manera de poder dar con el vehículo adecuado, pero nada se le ocurría.

—Creo que tengo una idea —Peter miró a Kate esperando a que esta continuará. —Con Bishop Security tengo acceso a las cámaras de la zona —decía la arquera mientras tecleaba en su laptop.

A Peter se le prendió un foco en ese momento. —Si consigues una imagen nítida de la matrícula podrías traquear la ruta que siguió después de eso —agregó.

—Me leíste la mente amor —el castaño agachó la cabeza intentando ocultar el rubor en sus mejillas al ser llamado de esa manera. Kate lo observó de reojo y no pudo esconder la sonrisa que le generó la adorable actitud de su novio.

Minutos después Bishop parecía haber dado con lo que buscaban. —Creo que lo tengo —exclamó ella. —Anota —el arácnido tomó papel y lápiz. —T, A, S, cinco, cero, seis, siete.

—Encaja con la de Yuri, pero ¿Segura que es esa? —preguntó Peter.

—Pertenece a un sedan negro que dio vuelta en la esquina a la misma hora del asesinato —respondió Kate.

Ya tenían la parte importante, que era la matrícula "TAS-5067", solo faltaba hacer el trackeo de la ruta que el vehículo siguió posteriormente, con un poco de ayuda de Bishop Security y su acceso a las cámaras de la ciudad.

Aunque no dejaba de ser un poco raro que dos jóvenes universitarios hayan podido conseguir la matrícula completa tan rápidamente y la policía no, o quizás la policía ya tenía esa información, pero Yuri no quiso dársela a Spidey. Esto último era una posibilidad bastante probable.

—Lo tengo —dijo Kate, el castaño se levantó de su lugar y se colocó detrás de ella para observar la pantalla del computador.

El mapa marcaba un ruta clara, que iba desde el edificio de Silvermane en el Distrito Financiero hasta un sitio en Upper West Side. Kate buscó la dirección en internet y parecía ser una vieja fábrica.

—El lugar está abandonado —comentó Peter.

—No es un mal lugar para una guarida de supervillanos —habló Kate con un tono bromista.

—¿Crees que sea ahí? —preguntó el castaño pegando su mirada con la de Bishop.

La arquera lo meditó unos momentos —Sí, eso creo —afirmó ella sin estar del todo segura.

Telarañas y Flechas | Spider-BishopDonde viven las historias. Descúbrelo ahora