Merlina una persona que no le gusta nada colorido ni música pop, solo se ha interesado en saber quién es su acosador.
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Enid ella es lo opuesto a Merlina, le gusta la música pop y los colores, también siente un gran apego a su compañera de cuarto.
...
-Por favor... solo mírame, no me dejes de mirar, casi llegamos.
-Perdón...-
-¡MERLINA!- Cuando reaccioné estaba en los brazos de la rubia, resbalandoze unas lagrimas en el rostro de ella.
-¿Estás bien? ¿Necesitas que te ayude en algo?- habló preocupada.
-Mierda- susurré, no me gustaba ver ese rostro de la rubia radiante, no es de su talla.
-Estoy bien- hablé cortante y me levanté lo más rápido posible.
-¿Segura?- dijo preocupada todavía.
-Sí- contesté.
Enid estaba preocupada pero la azabache dijo que estaba bien, así que no tuvo más opción que calmarse.
Merlina estaba pensado, ¿Quién era la persona que de su visión? ¿Era ella la persona que le estaba diciendo que no cerrara los ojos? Merlina no lo sabía, pero sabía que estas Visiones iban a pasar luego.
Cuanto más pensaba en esa visión más confundida estaba.
Fui sacada de mis pensamientos cuando escuché el sonido del estúpido celular que me regalo Xavier.
-No creas que te he dejado de observar- Era el mismo contacto del que siempre le manda esos mensajes, Merlina se podia acostumbrar a estos mensajes.
-Si haces algo estúpido quien sabe que le pueda pasar a tu rubia la loba- mandó otro mensaje esa persona, pero esta vez Merlina si se preocupo cuando leyó el nombre "Rubia la loba" sabía que de la que estaba hablando el/ella era de Enid.
Merlina solo quedó viendo fijo a la pantalla, esperando que mandara otro mensaje pero no mandó nada más.
Cuando Merlina iba a dejar el celular el contacto le mandó otro mensaje, pero esta ves era una foto.
-Te observo en todas partes que estés, Addams-
Mandó el mensaje el contacto y una foto donde estaba Enid y ella en la habitación sentadas en la cama de cada una.
Merlina rápido se levando alertando a la rubia, pero Merlina no le dio importancia y rapido se fue para la ventana.
No vio a nadie, Merlina salió de la habitación para la dirección donde fue tomada la foto y vio a alguien.
Merlina lo estaba siguiendo cuando por fin lo alcanzó.
(...)
-¿Quién eres?- habló Merlina, el hombre no contestó y quiso correr pero Merlina fue más rápida y se le tiró encima con una daga en el cuello del contrario.
-Dije, ¡¿Quién eres?!- habló con una mirada amenazante, el hombre sabía que si no contestaba en ese mismo instante moriría.
-Mucho gusto, "Addams" soy Carlos- habló el hombre todo desnutrido, -Nada de gusto, ¿Por qué estabas en frente de mi habitación?- Merlina preguntó sin alardear, ella no andaba para hacerse amigo del hombre que podría ser su acosador.
-No me malinterpretes, yo solo hago mi trabajo- habló el hombre y siguió -Tú por qué estas aquí ha estas altas horas de la noche en medio del bosque?- habló el hombre señalando -Eso no te importa- hablé acercandole más la daga en el cuello.
-Lo digo porque puedes lastimarte- habló sin ser intimidado por Merlina, -No hay nadie que pueda lastimarme a muerte- hablé con una risa burlona demostrando confianza.
-¿Segura? Ya quiero ver que alguien te venga a salvar- habló riendose, Merlina le hervía la sangre.
-No necesito a nadie que me venga ha salvar- hablé, -Y tú....- Cuando iba a seguir hablando sentí como algo se había clavado en mi pecho.
Era un palo de madera/ estaca, clavada en mi pecho y otra en mi pierna y cuando quería moverme rápido me clavó en el estómago.
-Mierda- hablé con una voz adolorida, me gusta el dolor pero esto no me gusta.
El hombre se empezó a reír por el show que le estaba dando.
-Bueno Merlina. Fue un gusto haberte conocido, yo debo irme antes de que te vengan a salvar- habló riendoce a carcajadas burlarse de mí, mierda lo quiero matar.
-Nadie vendrá- hablé apenas, Mierda no puede hablar bien por la estaca clavada en mi estomago, estaba perdiendo sangre. Iba a morir desangrada.
El hombre se marchó no antes de decir algo, -Si no quieres que la rubia salga lastimada, es mejor mantenerla lejos de ti y del problema- Me miró y se retiró corriendo.
-Lo sé, sé que tiene que estar alejada de mí, pero por alguna razón no quiero- susurré, cerré mis ojos ya aceptando mi muerte.
-ina! -Mer! -¡MERLINA!- Escuché como alguien decía mi nombre a gritos pero no podía abrir mucho mis ojos, estaba débil por la perdida de sangre.
Pero hice el esfuerzo para abrir los ojos y lo hice.
Cuando los abrí, vi a la rubia con la mirada llena de lágrimas, "mierda siempre la hago llorar" pensé sintiéndome culpable.
-¡MERLINA!- gritó Enid al ver que Merlina abrió los ojos.
-E...nid- apenas podía hablar, me costaba respirar.
Cuando Enid escuchó a la azabache que no le salió la voz, Enid le salieron más las lagrimas, ella le dolía ver a Merlina así.
Merlina se sentía débil y con sueño así que habló -Tengo sueño- habló Merlina por lo que Enid se alertó.
-¡Por favor! ¡No cierres los ojos!- habló con la voz rota, estaba llorando aún más.
Merlina no podía hacer eso, ella se sentía débil.
Enid miraba como Merlina estaba cerrando los ojos poco a poco y ella habló- No, no puedes hacerme esto... ¡No puedes!-.
Enid la cargó y corrió hacia el colegio lo más rapido posible. -Por favor.... Solo mírame, no me dejes de mirar, casi llegamos-
Merlina miraba como la rubia corria por todo el bosque a camino al colegio, ella Susurró -Siempre terminas salvadome- Enid se sorprendió al escuchar eso, pero sabía que ahora no era el momento para eso.
Merlina solo pudo agarrar fuerzas para decir -Perdón- Merlina dijo la última palabra y cerró los ojos por completo.
Quién sabe si los podrá volver abrir o será la última ver que la rubia vera esa mirada oscura que siempre tiene.
CONTINUARÁ...
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