Harry llevaba unos cuantos días con una enorme frustración sexual. Es que tener a un curvilíneo muchacho correteando por la casa no ayudaba mucho. Se estaba comportando como un completo hormonal de 16 años que se calentaba por un simple abrazo del menor. Obviamente no dejaba que este se entrara o le haría sentir muy incomodo a su lado.
Hoy, sábado, Harry había decidido quedarse tranquilo en su cama viendo alguna serie de Netflix e intentando desconectar del trabajo por un día. Bajo a la cocina a por algún aperitivo para empezar su maratón cuando al entrar a esta se encontró con Louis cocinando (algo que olía demasiado bien para este mundo) en la sartén.
- ¿Qué haces, Lou?
- Hoy Marry no está – Dijo sin girarse a mirar al mayor. El menor aún no sabía pronunciar el nombre de la amada cocinera.
- Sí tenías hambre podías haberme avisado.
- Tu estar... tu ocupado con trabajo – Harry le miró confundido.
- Es sábado, no trabajo los sábados, iba a ver películas arriba por si...
- Diviértete, ¿tortitas? – Interrumpió girándose y dedicándole una sonrisa, devolviendo rápidamente la atención a la sartén.
- ¿Te gustan las películas? - Se giró para confrontar al rizado.
- No ver muchas - A veces le molestaba un poco la inhabilidad del ojiazul para captar indirectas.
- Netflix suele tener unas muy buenas.
- No sé que es e...
- Louis, ¿quieres venir a ver películas conmigo? – Interrumpió el más alto.
- Oh, Ok. Terminar tortitas antes.
- Bueno.
- ¿Donde chocolate?
- Balda de abajo – Y cuando el menor se agachó juró que pudo ver la forma de las panties que llevaba debajo de los pantalones de pijama. Podía apostar a que eran azul marino de seda contrastando a la perfección con la piel de caramelo del menor. Se llevó dos dedos al puente de la nariz tratando de fijarse en otra cosa que no fuera el voluminoso trasero del castaño.
-🐈-
- ¿Qué película quieres ver? – Ambos estaban ya en la cama del rizado bajo las cómodas sábanas buscando una película para comenzar.
- Esa – Dijo señalando "365 días". Harry se giró rápidamente y tuvo claro que no iba a corromper a esa persona con una película así.
- Mejor esa no.
- ¿Esa? – Dijo señalando a Insaciable.
- Esa tampoco, Lou.
- Pffff, esa – Esta vez era Titanic, algo aceptable.
- ¿Seguro?
- Sí, chico guapo – Harry rió.
- Es Leonardo di'caprio, mi crush de cuando era niño.
- ¿Crush?
- Mmm... El chico que me gustaba.
- Oh, mi crush ahora.
- ¡Eh! No me lo robes
- El prefiere a ti, tu guapo.
- ¿Soy guapo?
