ZANIAH NASHIRA BLACK

CAPITULO 4

ORFANATO DE WOOL, LONDRES (30 de septiembre de 1984)

Se podía apreciar a una niña no más de 3 años, con la apariencia de una muñeca de porcelana, muy hermosa, con el cabello recogido a un lado chueco pero amarrado con un trapo, con ropa vieja pero bien amarrada, que tenía mejor vista que el resto de niño ahí, ella se encontraba cerca de un árbol alejada de todos, susurrando algo a un rincón del árbol, si te acercabas lo suficiente verías que estaba hablando con una serpiente pequeñita.

Dicha serpiente era de piel escamosa y verde brillante, que tenía la habilidad de cambiar de tamaño para que sea fácil pasar desapercibida, puesto que ocultaba muy bien su esencia

Como la obtuvo, fácil solo tuvo una idea y la realizo cuando escucho a la mañana siguiente a alguien pidiendo comida se despertó al instante pensando que alguien estaba en su lugar para dormir, difícilmente se podía decir habitación a tal lugar, pero al no ver nada siguió el sonido y se fijo en una esquina donde había una serpiente pequeña y se sorprendió más al poder entenderla. pero como ella ya sabia hablar y leer un poco después de todo aprendes mucho observando, recordó que en uno de los libros de reptiles todo lo que comen las serpientes y le dijo que le traería moscas pero que no saliera del cajón, sin que ella lo sepa estaba hablando la lengua de las serpientes.

Y esa serpiente se convertiría en la primera familia para ella

La niña en cuestión era "Monster", o "fenomeno" así la llamaban, cuando la recogieron día siguiente a la tormenta, pensaban que estaba muerta, pero la niña estaba viva no lloraba.

Todos pensaban que era muda

Al verla las cuidadoras jóvenes, se enamoraron de la bebé, puesto que era muy bonita, pero una de las cuidadoras más ancianas se las quito la dejo encerrada en un cuarto y ordeno solo darle lo necesario un biberón para todo el día, no quería que se encariñaran con la bebé puesto que ella tenía otros planes para ella.

Cuando la niña tenía un año y 2 meses podía hablar y caminar perfectamente, una actividad extraordinaria para su edad.

Pero también empezaron a pasar cosas raras cuando se enojaba, cosa que asusto a todos, y la dejaban encerrada en la habitación más vieja donde botaban todos los libros y cosas sin valor.

 Le daban comida una ración para una semana, con la esperanza de que muera.