CAPITULO 25

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Había una sala muy grande, apenas iluminada. 


Altísimas columnas de piedra talladas con serpientes enlazadas se elevaban para sostener un techo que se perdía en la oscuridad, proyectando largas sombras negras sobre la extraña penumbra verdosa que reinaba en la estancia. 


Aun con el lumos en sus varitas avanzaron por entre las columnas decoradas con serpientes. 


Sus pasos resonaban en los muros sombríos.


A Theo, Zaza y Tori les parecía que las serpientes de piedra los vigilaban desde las cuencas vacías de sus ojos.


En cambio Zaniah estaba fascinada con tantas serpientes de decoración.


Cuando llegaron al último par de columnas, vieron una estatua, tan alta como la misma cámara, que surgía imponente, adosada al muro del fondo.



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ZANIAH: Hay abuelo, que extravagante

ZAZA: Ese es Salazar Slytherin

THEO: Si, definitivamente es una estatua de su cara


En eso los cuatro vieron una pequeña figura con túnica negra y el cabello de un rojo encendido.

TORI: Que hace Weasley niña aquí?



Se acercaron y vieron el diario a lado

THEO: El diario no estaba contigo. Le pregunto a Zaniah

ZANIAH: Lo deje en mi habitación, supongo que ya había cumplido su cometido y volvió a manos de quien lo intento tirar

TORI: Como saldría de tu habitación si nadie podía entrar a menos que tu lo permitas.

ZANIAH: Si es capaz de absorber magia significa que podía regresar a su dueño o en este caso a su poseedor que lo tiro

THEO: Supongo que el diario tiene mente propia y una fuerte cantidad de magia incrustada

Zaza se acerco y con un pie movió el cuerpo


ZAZA: Estará muerta?. Dijo viendo que tenía la cara tan blanca y fría como el mármol.

ZANIAH: Lo dudo aun tiene signos vitales aunque...

 —No despertará —dijo una voz suave. Interrumpiendo a Zaniah

ZANIAH NASHIRA BLACKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora