Puede que en estos momentos sea la persona más nerviosa del planeta. Espero pacientemente junto a Zeke a que llegue el carruaje que me va a llevar a mi boda. Probablemente Dedrick ya esté allí igual de nervioso que yo. Llevamos mucho rato esperando pero sigue sin aparecer y no es diez minutos antes de que empiece mi propia boda cuando me doy cuenta de que ya no va a venir.—Zeke, tenemos que buscar una manera para llegar.
Miro desesperada a los lados en busca de algo que me pueda servir y entonces lo veo, un gran objeto de metal que hacía tiempo que no lo veía, creo recordar que se llaman coches y que van vas rápido que los carruajes, así que tomo a Zeke del brazo y tiro de él hacía esa dirección. Dentro del coche se encuentra una chica pelirroja con lo que supongo que es su novio mirando maravilla las casas. Hago no lo único pero si lo más efectivo que podría hacer, llamo con los nudillos a la ventana. La chica da un respingo sobresaltada le indica algo a su novio y acto seguido baja la ventanilla.
—Hola, ¿nos podéis llevar a la iglesia?—pregunto apresuradamente porque ya vamos tarde.
Se quedan pensativos demasiado tiempo por lo que subo directamente antes de que me den permiso y Zeke hace lo mismo, se que está mal pero es que de verdad que tenemos mucha prisa. Al chico que conduce no parece importarle así que comienzo a darle indicaciones porque dudo mucho que sepa a dónde tiene que ir. Aparca en frente de la iglesia y la chica se gira hacia nosotros cuando nos disponemos a bajar del coche.
—¿Puedo ser vuestra fotógrafa?—levanta la cámara.
—Eso es, Breen, necesitamos fotos—dice Zeke apoyando la idea.
—Está bien—hago una reverencia como me han enseñado cuando era pequeña—Breena—me presento.
—Olivia.
Entran ellos antes y Zeke y yo les dejamos un margen de tiempo, entonces enhebra su brazo con el mío, ya que es mi padrino, no he invitado a mi padre, y entramos. En el fondo veo a Dedrick junto al cura, está guapísimo, y no lo digo porque vaya a ser mi marido. No me he dado cuenta de el momento en el que Zeke me ha soltado miro fijamente a los ojos de Dedrick para fingir que no me tiemblan las rodillas. Las palabras del cura se amortiguan bajo el sonido de los latidos de mi corazón que golpean fuertemente contra mi pecho. Mi cuerpo funciona automáticamente no se si he accedido o que ha pasado pero de repente siento los carnosos labios de Dedrick sobre los míos, me aferro a él para buscar estabilidad. A pesar del nerviosismo soy la persona más feliz del mundo, hasta que cuando me dispongo a salir veo en el fondo de la sala a la única persona a la que no esperaba encontrarme. Mi hermano.
Este final es temporal, hacía tiempo que sentía que no me apetecía continuar con esta historia, ya que tenía otros proyectos en mente, no descarto terminarla como se merece en un futuro. Pero Gracias por leerla :)
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Un trono de tormento y susurros
Teen FictionBreena es una chica que tras la muerte de su hermano queda heredera al trono, nunca pensó que fuera tan difícil ser reina. Junto a Dedrick, el príncipe con el que debe casarse, recorre un largo camino de tormento y susurros. Ella está rota y él es l...