CAPÍTULO 2. EL CLUB

576 80 5
                                    



ELA

Dejar la casa club, mi casa y a mi familia sin duda era lo más complicado, era un sentimiento que no podía describir, pero ahora mismo mi cuerpo solo estaba lleno de ira, rabia y mucha sed de venganza.

Limpiaba las mesas de mi bar mientras preparaba todo para abrir. No me iba mal, relativamente yo tenía lo que un día quise. Tenía mi propio trabajo, el bar era el mejor sitio del pueblo. Habían pasado dos semanas desde que me mude del sitio donde Crash y yo juramos estar juntos por siempre.

No podía negar que me dolía dejarlo, sabía que él estaba sufriendo, pero también sabía que Crash es capaz de dar su vida por el club. Ese hombre es tan leal al club que incluso recibiría una bala por su familia. No lo culpo, mi padre lo había dominado toda la vida. Yo comprendía ese sentimiento y sabía perfectamente que mi padre hubiese preferido un niño, es por eso que Crash fue como su propio hijo, y estaba preparándolo para que el lidere en un futuro.

¿Y yo?

Yo sé que tengo las agallas para ser presidenta. Sé cómo funciona un club y el respeto de todos me lo he ganado, pero mi lealtad tenía un límite. Yo era Ela, y era una Rebelde, una persona que buscaba respuestas y un culpable.

– ¿Ela?

Dejo el limpión en la mesa y camino hacia una de las mesas.

Clau y Frenta me veían. Ellas lucían algo cansadas.

– ¿Qué sucede? – pregunto.

– Lo hemos dejado – menciona Frenta – . Al club, estamos contigo, Ela.

– ¿Conmigo? Esto no es un enfrentamiento, chicas. Agradezco su gentileza, pero diré que no.

– Tu padre ha revolucionado el club, Ela. Nosotras ya no tenemos la seguridad que un día nos prometieron – . Ahora era Clau la que hablaba, y eso me parecería algo inusual ya que era una persona muy reservada. Lo poco que conocía de Clau, era que ella era extremadamente observadora, pero conversar no era lo suyo.

– ¿Y qué les garantiza que yo pueda ofrecerla? Chicas, esto no es un club. Soy solo yo.

– Estamos contigo, Ela. Te ayudaremos a buscar respuestas. Eli no merecía lo que le pasó. – Frenta – . La queríamos, y no merecía nada de lo que pasó. Tu padre nos ha demostrado que solo somos unos coños ahí, las cosas no están bien. No queremos formar parte de algo que puede salir mal.

Las miro y cruzo mis brazos.

– No puedo protegerlas, y sé que lo necesitan. No quiero exponerlas a nada.

– Sabemos cuidarnos, Ela. El club nos enseñó grandes cosas, una de ellas a usar un arma, y debo decirte, que algunos prospectos han abandonado el club. Déjame que hablé con ellos y esto será una revolución. Sabes perfectamente que los prospectos quieren un hogar, y tú conoces todo de un club, puedes empezar con algo pequeño, pero te conozco y sé que eres capaz de liderar un club de moteros. Tienes ese fuego, Ela, y tienes mi respeto.

Suelto un suspiro y paso mis manos por mi cabeza.

– ¡Esto es una locura! Mi padre tomará esa acción como una guerra contra él. Chicas, yo renuncié al club y no me arrepiento de nada.

– Esto ya es una guerra, Ela – Frenta mira a Clau y luego a mí – . El padre de Demian ha amenazado al club, su hijo está muerto y la guerra ha empezado. Esto no resultará bien.

– El hijo de Demian no tenía la culpa, pero Demian y su presidente mataron a Esi, y deben pagar. Sus hijos no me importan, pero el presidente de Redención Mc, sí. Y pienso ir por él –recalco esa información porque es mi objetivo.

– Lo sé, Ela. Nosotras te ayudaremos – . Frenta, ella suspira – . Clau se involucró con ese club, ayudó a tu padre para que pudieran matar a ese chico.

– ¿Clau..? – la miro y ella cierra los ojos, sabía que la culpa la carcomía.

– Tu padre me convenció para involucrarme con Tobías, así se llamaba el chico. Ela, el plan no era matarlo, me engañaron también. Tu padre quería vengarse, pero no sabía que lo iban a matar. Yo lo vi, Ela. Dispararon a ese chico en la carretera, yo no pude hacer nada.

Yo sentía que la información que me daban, era errónea. Todo esto no tenía ningún sentido, nosotros nunca matamos por matar, siempre lo hicimos bajo un "justificante" ¡No matamos a personas que no tiene la culpa de nada!

>>Lo siento, Ela. Sé que esto complica todo.

– Lo complica, Clau, y mucho. Necesitamos protección, soy la hija de su rival, vendrán por mí. Pero estoy preparada. La muerte nunca se sintió tan cerca, y él miedo no juega por ahora.

– Tienes nuestro apoyo Ela, lo que suceda desde ahora, depende de ti.

– Mi bar será nuestro club ahora mismo, y vamos a necesitar toda la ayuda posible, pero es necesario que Redención MC se entere que mi padre y yo, ahora somos rivales.

– Nosotras nos encargaremos de eso, y conseguiremos todo el apoyo posible. Tú prepara este sitio, Ela. Este será nuestro club.

– Lo será – afirmo con determinación.

Las chicas salen del lugar y yo ya me estoy moviendo para preparar todo.

Esto recién inicia... no sé cómo acabe, pero por el momento pintaba muy mal.

– – – –

Hola lindas, lamento la demora.

Espero hayan pasado unas grandes fiestas y este año inicia con este capítulo, debo aclarar que el libro será algo corto, pero intenso.

Espero les esté gustando...

Un beso.

REBELATE - Saga Rebeldes #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora