Prólogo

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ELA

Vacía.

Llena de soledad.

Dolor.

Ardor en el pecho.

Sentir que tu corazón está a punto de salirse.

Todo eso era lo que sentía ahora mismo, mientras el club entero permanecía en silencio algunos prospectos rellenaban con tierra el ataúd. Ahí se iba una parte de mi vida, con cada grano de tierra mi vida se iba.

Mi hermosa Esi, mi hermana. Sin duda alguna era la mujer más increíble que jamás conocí, con su largo cabello castaño, con sus ojos tan negros como la misma noche y esa sonrisa que ahora resplandece solo en mi memoria.

Mi hermana, la pequeña niña de 2 años que llegó a nuestra casa cuando sus padres perdieron la vida en un accidente que involucró a todo el club. Esa dulce niña que sostuvo mi mano mientras yo me negaba a tener una hermana, sin embargo, ella se ganó todo mi amor.

Papá no decía nada, seguramente sus emociones no saldrían, nunca lo hacían. Siendo el líder de su propio club no derramaba ni una sola lágrima ni siquiera cuando su hija adoptiva había fallecido. Para mi mala suerte yo había heredado esa frialdad, porque, aunque dolía, estaba en una especie de shock emocional. Esi no merecía esto, no lo hacía, y tenía mis sospechas. Sabía perfectamente que los rivales del club (Redención MC) estaban detrás de todo esto, y sabía perfectamente que eso era un mano a mano, pronto ellos recibirán su merecido. Una hermana por un hermano. El líder de ese club tenía a sus dos hijos, y aunque sabía muy poco de ellos, no iba a descansar hasta acabar con ellos.

– Ela...

La voz de Crash interrumpe mis pensamientos. El único hombre al que amo completamente y quién me tiene completamente loca, sus oscuros ojos me miran sin emociones. Su mano agarra mi hombro y besa con cuidado mi frente.

– Nena, es hora de irnos. Todos se han ido ya.

Cuando miro a mi alrededor solo puedo ver tumbas, y ahora debía dejar a mi hermana aquí.

– Hace frío – señalo lo obvio.

– Es hora de ir a casa.

– Esi odia el frío.

– Ela...

– ¡No la dejaré sola!

– Ela, escucha.

– ¡No!

Me zafo de su agarre y el me sujeta lentamente.

– Ella ya no está. Ela, debemos ir a casa, no es seguro estar aquí.

– No puedo, Crash. No puedo dejarla.

Sus ojos me observan angustiado, sabía perfectamente que él no tenía palabras. Crash era igual que yo en ese aspecto, no sabíamos cómo expresar nuestras emociones, y nos costaba tan solo decir lo lamento.

– Ela, no es seguro. Nada de esto lo es. Debemos ir a casa y tratar de averiguar quién mató a Esi.

– ¿Lo vamos a matar? – pregunto. Mis ojos se conectan con los de él, él sabe que no estoy jugando.

– Lo haremos – afirma.

Crash agarra mi mano y camina conmigo. Mi respiración se vuelve pesada, miro la tumba de mi hermana y por momentos siento que me voy a desmayar. Todo pasó tan rápido que apenas y estoy consciente de que mi cuerpo está muy débil. No recuerdo la última vez que comí algo.

Cuando finalmente llegamos a casa mi cuerpo se siente muy pesado, y el cansancio empieza a hacer efecto. Me recuesto en el sofá de mi casa y mis ojos se cierran de inmediato.

*****

Entender el duelo era complicado, pero en mi dolor solía cabía una palabra.

Venganza.

Muerte.

Destrucción

Y todo eso retumbaba en mi cabeza, todos los días como una lanza.

Crash lo sabía, me conocía tan bien. El sentía como mi piel y mi cuerpo se erizaba al pensar mi momento oportuno para atacar a los asesinos de Esi. Lo triste era entender también que estaba dispuesta a morir por hacerlo, y de cierto modo y sonando egoísta, no me importaba hacerlo.

– ¿Ela?

– ¿Sí?

Crash camina hacia mí, él recarga su frente contra la mía. Su olor invade mis fosas nasales. ¡Cuanto lo amaba! El único hombre de mi vida, mi primer amor, él niño que mi padre rescató. Crash forma parte del club desde hace 20 años, y  justo cuando yo cumplí la mayoría de edad se involucró con el club y desde ese día nadie ha podido separarnos. Desde ese día mi amor por el solo ha aumentado. Lo amo a cada instante y no hay nadie más que él en mi vida.

Sus enormes brazos sujetan mis mejillas y me besa.

– Ela, debes dejar esto en manos del club.

– ¡Yo soy parte de este club!

– Ela, deja que tu padre y yo nos encargamos de esto. Es más complicado de lo que parece.

– Han pasado meses y mi padre no hace nada.

– Ela....

– ¡No puede seguir así!

– Son decisiones del club, Ela. Debemos saber actuar.

– Mi padre actúa como si esto no fuera un gran problema.

– Y no lo es.

Al oír esas palabas mi rostro cambia.

>>No es lo que quería decir, ¡Es un jodido problema, Ela! Pero no podemos desviar nuestra atención.

– ¿Atención? – pregunto con ironía – . ¿No es de tu jodida atención la muerte de Esi?

– Ela, tu padre tiene el control. Es tu Prez y debes respetar sus decisiones.

– ¡Al carajo sus decisiones Crash! ¡Al carajo este club!

– Ela, no hables jodidamente así. Mira tú chaleco, Ela. ¡Eres parte de este club!

– Un jodido club de mierda – mis ojos conectan con lo de él – . Un jodido club de mierda que no hace nada por mi hermana. ¡Una porquería de club! No somos un pedazo de carne, Crash. Mi hermana está muerta y todo sucedió por este maldito club.

– Ela, no sé qué mierda te sucede, pero olvidaré que hayas hablado así de tu propia familia.

– ¡Este club no es mi familia! – me quito el chaleco con fuerza y lo lanzo lejos. La mandíbula de Crash se tensa, yo era su Vieja Dama y sabía perfectamente que lo que acababa de hacer era la mayor ofensa.

– No discutiré contigo. Necesito aire.

Crash agarra las llaves de su motocicleta y se va, yo solo puedo ver el material de cuero en el suelo, sin embargo, no quise recogerlo.

Si este club no iba a reaccionar sobre la muerte de mi hermana, yo lo haría, y estaba dispuesta a pagar las consecuencias

***

Hola lindas, espero se encuentren muy bien. Después de mucho tiempo he regresado, las que me siguen por Instagram saben los motivos y no quiero explicar mucho, solo puedo decir que este último año ha sido muy difícil y me ha costado volver.

Antes que nada, quiero comentarles que esté libro es muy a mi estilo, así que se tocarán temas muy sensibles. Espero les guste. Las actualizaciones trataré de hacerlo 1 día a la semana que puede ser: viernes o sábado.

Si tienen dudas, me las pueden dejar por aquí ->

Les mando muchos besos XOXO









REBELATE - Saga Rebeldes #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora