Azul y Marrón

Una oportunidad perdida

Después de haber desahogando su llanto en aquel cuarto y haber usado unas gotas para calmar sus ojos irritados, por fin salió a ver toda las actividades que se estaban realizando alrededor. De hecho encontró a Checo preparándose para usar el Livery del año pasado, tenía que admitir que el cambiar los colores del Red Bull había sido refrescante en su momento.

Lo vio parado en medio del garage, observando el carro con gran intensidad como si estuviera recordado algo, lo conocía bien, sabía que su ex suele tener pensamientos internos y he allí la presencia de algunas caras de confusión las cuales sabía que circulaban en el internet y que consideraba tiernas. Pero esta vez no se trataba de esa mirada de "ternura" y lo sabía por los rasgos de su rostro, estaba triste, era un recuerdo triste.

Max no recordaba que Checo hubiera tenido un momento melancólico con este carro, al contrario le fascinaba este diseño e inclusive todo le exaltaba de Japón a este hombre, la comida, las calles, el karaoke...

Su primer beso fue en un karaoke.

Aun recordaba que sonaba la melodía de "Say You Won't Let Go" cuando sucedió, fue intenso y a la vez tierno; recordaba haberse abalanzado a Checo esperando disfrutar de esos labios que muchas veces le habían tentado cuando tenían entrevistas juntos. A partir de ese momento descubrió que le excitaba a su amante que él enterrará sus dedos en la parte de su nuca con la intención de desordenar su cabellera negra, le prendía de sobremanera y aún borracho recordaba cada detalle de ese momento y lo había guardado en su corazón.

Levantó la vista y allí estaba Checo mirándolo profundamente, como si los dos hubieran conectado el recuerdo al mismo tiempo. Las cosas a partir de ese día habían sido felicidad pura y ahora solo se preguntaba ¿Por que esos momentos no habían durado todo una vida?

Una llamada rompió la conexión de sus miradas, era el celular de Checo, su ringtone en español definía muy bien a quien pertenecía, se recargó en la pared cercana para ver a su ahora compañero de equipo ir a contestar la llamada.

Algo había cambiado en el ambiente, lo podía percibir a distancia, el rompimiento les había afectado bastante y sabía perfectamente que el único culpable de todo era él mismo. El decidió terminar con lo que habían construido durante un año de relación y aún no podía creer que le bastó solo un día para tirar a la basura la confianza que Checo había depositado en él.

Fue un estupido por creer todo lo que le dijeron.

Si Lewis, nos vemos allí. No, no lo he olvidado - Max parpadeó varias veces tratando de entender lo que había escuchado hace un momento - Si, lo prometo. Adiós - esto no podía ser verdad. Max automáticamente se irguió y caminó firmemente en dirección a su ex sin importarle que hubiera más personas a su alrededor.

Me puedes explicar porque estás quedando con Hamilton - Max ya tenia sus manos a cada lado de la cabeza de Checo, viendo al mexicano desorientado por su abrupta llegada.