Pou en Morioh

Capítulo 1: La llegada

Este es el primer libro que escribo en Wattpad, así que va a ser algo difícil para mí narrar toda la historia ya que soy una poronga escribiendo, en fin espero que te guste.

Vale, seguramente eres un fan de JoJo's que al ver la portada y el título no te pudiste resistir a la tentación de ver esta mierda de crossover entre un par de armatostes de dos metros y un bicho espacial que no sé como chingados cuida de un hámster. Creo que me voy a arrepentir de esto dos años más tarde.

***

Era una mañana cálida cuando todo Morioh tembló ante la llegada de un ser que cambiaría todo lo que circulaba por esas calles. En efecto, ese alguien no podía ser nadie más que nuestro poderoso Pou.

—Ahh, ya llegué a este pueblo, todo parece una mierda comparada al Google maps, Ohio es incluso mejor que esta mierda —se quejó Pou —. ¿Qué verga? — Pou estaba confundido debido al tono amarillento del cielo, pero decidió asumir que era normal en este pueblo.

—Joder, quise traer a mi hámster conmigo pero el FBI no me dejaba porque decía que era abuso animal — suspiró Pou.

Al poco tiempo de salir del aeropuerto, él decidió que estaba exhausto por lo que pidió un taxi. Sin embargo, debido a la altura de Pou (50 cm) el taxista casi lo atropella.

—¡PERO QUÉ COÑO TE PASA, CHINO DE MIERDA! — gritó Pou enfurecido.

—¡No es mi culpa no poder verte enano asqueroso! — se excusó el taxista—, ... y tenía que ser negro el pibe... — añadió.

Pou se ofendió, pero estaba demasiado cansado para replicar, así que se aguantó las ganas de morderle la rodilla y puso su maletita en el asiento del acompañante y se sentó encima. A medida que circulaba el taxi por la ciudad, Pou contemplaba nuevos lugares y se emocionaba por ello, ya que eran bastante exóticos, algo que en su casa no tenía porque eran figuras geométricas. En cambio, aquí había una gran variedad de edificios y estructuras, todo ello pasaba por los ojos de Pou hasta que se dio cuenta de que el taxi había frenado y por lo tanto se despertó de su imaginación. Habían llegado al centro de la ciudad donde Pou se bajó para buscar el hotel que tenía reservado.

—A ver veamos el mapa, hum, mi hotel debería estar por ahí, voy enseguida que quiero descansar mis preciosas patas.

En el mismo instante en el que Pou se giró, algo duro se estampó contra su cara, arrastrándolo varios metros allá dejándolo con los ojos al cielo. Pou se imaginó a sí mismo arrancando las entrañas de este odioso sujeto para dárselas de comer a su hámster.
Después de maquinar un plan altamente diabólico e ilegal, Pou se incorporó lentamente, y al levantar la vista vio una majestuosidad, eran unas piernas bien macizas y musculosas, de esas que tanto le gustaban a Pou. Él no se podía imaginar la preciosidad que se encontraban ante sus ojos. Rápidamente miró hacia arriba y vio que las hermosas piernas eran pertenecientes de un adulto de estatura superior a la normal, con hombros robustos, espalda ancha y una mirada feroz pero apasionante que denotaba sus ojos negros. A su lado se encontraban dos estudiantes con uniformes escolares, uno era alto con una vestimenta azul con símbolos de corazones aunque lo más destacable era su peinado de estilo pompadour, mientras el otro era también un estudiante pero notablemente más bajito y con el pelo gris bien recogido.

—No te vi y te di contra mi pierna, disculpas por ello, ¿estás bien? — dijo aquel hombre. «¿Qué es esta cosa, no tiene aspecto humano, será obra de un stand?», este se alertó bastante por la figura de Pou.

—Emm, señor Jotaro, ¿está todo bien? —agregó el chico que se encontraba al lado.

—Sí, sí, está todo bien, Koichi, ¿puedes verlo?

—Qué, ah, ¿Jotaro te refieres a eso?

«Si puede verlo, entonces no es un stand, ¿que podría causar este fenómeno?», dudó Jotaro. Se quedó pensativo hasta que se dio cuenta de que aquello lo estaba mirando frenéticamente, Jotaro se sobresaltó un poco debido a la mirada de este.

«¿¿Qué está haciendo?? ¿Por qué me mira tanto? Debo saber si es una amenaza para nosotros, Josuke prepárate», dijo mentalmente Jotaro.

Pou estaba tan impresionado por la voz que Jotaro tenía, la forma que sus labios se movían, era un sueño verlas moverse.

—Josuke, Koichi ya os contactaré más tarde, voy a llevarme a esta cosa al hotel.

—Mi...mi nombre es Pou, y yo también voy a ese hotel, Jotaro.

(Los tres se quedan sorprendidos por la voz de Pou).

—Espera, qué hora es. ¡AAA Koichi rápido, que llegamos tarde al instituto en nuestro primer día!

—¡¡Adiós señor Jotaro nos veremos después!!

(Los dos corrieron tan rápido que dejaron a Jotaro y a Pou solos).

—Voy a ir al hotel de Morioh y voy a llevarte conmigo... para investigarte —contestó Jotaro.