El cambio de Marinette

Vieja amiga

Marinette salió del hospital con el bebé en brazos, está sin decirte nada camino hacia la panadería, al llegar visualizo a los trillizos atendiendo, está simplemente los ignoro y fue a su cuarto para después colocar el bebé en su cama con cuidado, Marinette se sentó al filo de su cama, realmente estaba muy molesto, no con Chloe, si no con ese gato, ¿Cómo se atrevía a quitarle a su esposa?, está dio largo suspiro y se recostó en su cama con cuidado al lado de su hijo, si quiera deshacerse de ese gato debía pensar con la cabeza fría.
Marinette duro un rato acostada acariciando el pecho de su hijo con delicadeza, en eso vio los tatuajes que tenía su brazo, tatuajes que se hizo al entrar con los Yakuza; en eso algo hizo click en la mente de Marinette, está rápidamente tomo su teléfono y busco uno de sus contactos, en cuanto lo encontró rápidamente marco.

-vaya vaya, después de tantos años por fin decides marcarme linda- decía la voz al otro lado del teléfono.

-déjate de eso Kagami, necesito un favor, un favor que solo tú puedes hacer- dijo Marinette.

-debi suponerlo, ¿A quien debo matar ahora Mari?- pregunto con interés.

-oh, nada más y nada menos que a Chat Noir, ese estupido gato me quitó a mi novia y futura esposa- decía con rabia.

-pensé que yo era tu novia y futura esposa- dijo en tono burlón la chica -en fin, debo suponer que ya tienes un plan, porque te recuerdo que vamos a matar a Chat, el héroe de París- comento aburrida la chica japonesa.

-no te preocupes Kagami, ya lo tengo formado, pero no podré hacerlo sin tu ayuda... ¿Cuando podrán venir?- pregunto de forma simple.

-déjame ver, mañana y pasado lo tenemos ocupado con dos golpes al banco... ¿Te pare este fin de semana?- pregunto tranquila.

-me parece bien, en ese caso te estaré esperando aquí- dijo la chica.

Después de que ambas intercambiarán un par de palabras más Marinette colgó la llamada, dejo el celular de lado y sonrió satisfecha, está salió de sus pensamientos al oír como la trampilla de su cuarto se abría dando paso a su hija mayor.

-mamá, Amunet me dijo que habías llegado con un bebé... ¿De quien es?- pregunto curiosa la niña.

-oh, esperaba decírtelo luego hija, pero ya que estás aquí ven, te lo presentaré- dijo Marinette a su hija la cual no dudo en acercarse. -el es tu hermano menor hija- dijo calmadamente.

-¡¿QUE?!, osea no me quejo pero, ¿Quién es mi otra mamá entonces?- pregunto curiosa la niña para ver feliz a su hermanito.

-prometo la conocerse hija, pero antes debo hacer desaparecer a alguien para que suceda- comento mientras acariciaba la cabeza de su hija.

-entiendo mamá- dijo jugando con la mano de su hermanito.

El fin de semana llegó muy rápido, Marinette se encontraba en el aeropuerto esperando a su vieja amiga, está no tardó en reconocerla, pues a lo lejos vio como venía con solo una mochila. En cuanto ambas se vieron se saludaron con la mano y una vez estuvieron cara a cara empezaron a hablar mientras salían del aeropuerto.

-me alegra verte de nuevo Marinette- dijo la chica.

-a mi también Kagami, espero que tus hombre no tarden en llegar- comento con aburrimiento.

-no te preocupes no lo harán, vienen por separado, después de todo sería raro ver a un grupo de hombre siguiendo a dos "inocentes" chicas- comento Kagami con cierto tono de burla en su voz.

-jeje tienes razón Kagami, bueno, una vez lleguemos te presentaré a mis amigos y a mis hijo, para después contarte mi plan- le comento tranquila a la japonesa.

-tranquila, después de todo no hay prisa alguna- dijo sin más.

Ambas después de eso subieron al auto de Marinette y partieron rumbo a su casa, mientras detrás de ellas a cierta distancia las seguían varios autos.