Aemond era un niño muy instintivo, aunque a veces no se paraba a razonar cuando percibía que algo no marchaba bien. Como ahora, hace unos momentos observaba con atención a Laenor. De su cara, algunas gotas bajaban por aquellas mejillas rojizas y su mirada estaba concentrada en otra cosa. Primero, pensó que hacía mucho calor, hasta el mismo estaba vestido con una camisa de paño, para no acalorarse. Pero desde que entraron al salón donde Laenor se hacía cargo de algunas solicitudes a su padre, Lord Corlys, para Marcaderiva; labor que pidió el mismo omega pues no se sentía del todo bien sin hacer nada; algo en el ambiente no se sentía bien y mantienen al pequeño Targaryen en alerta. La persona delante llevaba por lo menos veinte minutos dándole vuelta al asunto, mirando de forma grosera cuando Laenor trataba de ayudarlo a resumir su pedido.
—Bueno, Lord Westerling, mandare su pedido para las embarcaciones que necesita, pero solamente será para los botes pesqueros, la seguridad marítima siempre ha... — Laenor tuvo que cerrar los ojos por un dolor en su vientre que lo aquejo. —siempre ha sido velado por la flota Velaryon, si permito que... — esta vez un sonido parecido a un quejido entrecortado se hizo escuchar.
Aemond y las damas de compañía del príncipe consorte se acercaron al omega. Su cara ya no pudo esconder los dolores, que le avisaban que estaba a punto de dar a luz.
—No, amor, no salgas aún... Tu papá no está aquí...— Laenor susurro entre dientes mientras tomaba su vientre.
Después de un par de gritos, Aemond vio como los caballeros, maestres y damas de compañía que llegaron, se llevaban a Laenor. El como pudo tomó la espada de madera que le había regalado su tío Daemon (una réplica adorable de hermana oscura) y corrió tras ellos. Tenía que defender a Laenor mientras su hermana no estaba. Tenía que defender a Lucerys.
*/*/*
—Su majestad, tiene que tomar un descanso, un poco de...
—¡No! No tomaré leche de amapola... eso me debilitara...
—Pero parara el dolor príncipe Leanor....
—¡No! he dicho que no...
Aemond apretaba con preocupación la espada de juguete en una esquina mientras miraba con preocupación a Laenor. Sabía que todo estaba y estaría bien, pero aun así su pecho se contrajo con preocupación y su mentecita trataba de procesar lo que pasaba. Sabía que su Lucerys llegaría, y él tenía que estar junto a él. Pero en ese momento se sentía...
Un maestre llegó corriendo a la cama donde Laenor daría a luz, interrumpiendo los pensamientos caóticos.
—Han visto a Syrax por los alrededores majestad, la princesa llegará en cualquier momento.
Laenor sintió como si un bálsamo se aplicará en todo su cuerpo. Tenía miedo, faltaba por lo menos un mes para la llegada de Lucerys, no podía tenerlo solo. Sabía que Rhaenyra llegaría a tiempo, lo más seguro es que Sir Harwin venía con ella... el caballero, no lo dejaría tener al cachorro solo. Otro dolor lo aquejo, y siguió pujando.
No pasó mucho tiempo para escuchar cómo todo eran gritos afuera, seguramente Rhaenyra llegó directo al castillo junto a Syrax. No tuvo que esperar mucho cuando vio entrar con un portazo a Rhaenyra y Harwin, los dos buscándolo desesperadamente con la mirada. Aemond corrió a los pies de su hermana hundiéndose en el vestido, luciendo preocupado.—¡Hermana! ¡Tienes que ayudarlos, ayuda a Lucerys!
Rhaenyra miró preocupada a los maestre mientras estos le contaban lo que había pasado. Harwin se miraba nervioso, como si algo le pícara en las manos, quería acercarse a Laenor, necesitaba acercarse a él y a su futuro cachorro.
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LA FAMILIA DEL DRAGÓN
FanfictionAlicent muere al dar a luz a su hijo más pequeño. Ahora queda en las manos de Rhaenyra el futuro de sus hermanos, y esta dispuesta a hacer correr ríos de sangre por la felicidad y seguridad de sus cachorros. Jacaerys x AegonII Aemond x Lucerys Rha...