¿Todos conocemos la historia de la Caperucita Roja cierto?
• Pero... en vez de ser esa niña dulce para poder curar a su abuelita enferma, ¿es una adolescente de 16 años que fue por obligación?.
• Y que ese lobo feroz temible por todo el mundo, ¿es u...
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-Te lo agradezco...-dijo la licántropa entrando a la habitación
-Uhm?, porque darme las gracias?- volteo su mirada, mientras se sacaba su capucha oscura, haci dejando ver su ropa habitual de siempre.
-Jejeje, no te hagas!....
Tu fuiste la primera persona... en notar que no soy una monstruosidad como la demás gentuza piensa... realmente.... me vistes con otros ojos, toda mi familia, excepto mi padre, me a visto con mala cara, incluso considerándome como la excluida o la oveja negra.
Ya a pasado 4 meses que comence a vivir sola en el bosque, protegiéndome del peligro y de la gente, apenas puedo conseguir comida... y hace poco también me enlobe, así que será un poco difícil en aceptar mi lobo interior.
-La azabache solo se la quedo mirando, viendo sus orejas de la otra joven decaerse-
-Tranquila no necesitas agradecérmelo....- comenzó a acercarse a ella, así limpiando sus lagrimas que salían de la contraria.
Estaban cerca de la otra, sus corazones comenzaron a latir rápidamente sin control.
Merlina abrazo de las caderas de la rubia, haciendo que esta se le saliera un pequeño jadeo, y ella le respondió colocando sus manos en cada mejilla de la menor.
Sintieron la respiración de la otra, y empezaron abrir delicadamente sus bocas para así rozar sus labios.
Enid no podía con la tención, sus cachetes estaban ruborizados, haciendo que aparecieran sus garras y que le hagan una pequeña herida a la pelinegra.
-PERDON PERDON!-mencionaba mientras se tapaba su rostro con sus manos
-Merlina toco su mejilla-
-Jum.... pensé que mi sangre era de color negro...-esto llamo la atención de la hibrida, ¿no estaba enojada con ella?.-Porque estas callada, ven y bésame!-ordeno la azabache.
En ese instante la piel de la mechones pintados se erizo, y su gran cola de lobo comenzó a moverse lentamente. Así comenzando a acercarse a la Addams lentamente y suspirando.
-La volvió a agarrar de sus mejillas, que aquellas ya comenzaron a notarse un poco rojizas-
-Mate mío~.... -por fin juntaron sus labios, comenzando un suave pero fuerte beso, la de trenzas empezó a agarrar de su cabello a la mayor para darle más intensidad.
-Sinclair movía su cola de un lado a otro de felicidad, por fin había encontrado a su Mate, o mejor dicho, su Luna-
La loba dejo de besar a su amada, comenzando asi a morder el cuello de esta y dejándole chupetones. La contraria solo contestaba haciéndole mimos en su pelo.
Con su fuerza de lobo, la agarro de las caderas, cargándola y sin apartar sus labios de ella, sabían a cenizas, pero esto a Enid, le encantaba.
-Detén tus hormonas pequeña lobita~...-decía jadeando
-Ohh!~... sabes muy dulce Mate mío~....-decía escondiendo su rostro en los pechos de la pelinegra
-O acaso quieres que la bruja de mi abuela nos descubra?~...
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-¡Merlina!-grito alguien con voz ronca
La de trenzas se levanto del susto, pensó que la habían descubierto besando a la licántropa, pero todo fue su imaginación.
-Realmente llego un nuevo día para el mundo-
-Tienes suerte de que tu amiga este aquí!, o si no, ya te hubiera despertado con un balde de agua!, levante tu trasero y ayúdanos a las dos!-dijo la anciana que estaba afuera de su habitación, regañándole, acompañada de la rubia, quien esta, llevaba un jugo de naranja y un panecillo, ¿acaso era su desayuno?
-Tranquila señora... yo le dejare la comida a Merlina, usted puede encargarse de lo demás.
-Dicho esto la mayor de canas se fue frunciendo el ceño-
La lobezna se acerco lentamente a la joven, que ahora la reclamaba como su pareja, mostrando una sonrisa de oreja a oreja, llevando los alimentos a ella.
La menor sabia perfectamente lo que paso ayer, asi tocandose el cuello, para sentir las mordidas que Sinclair había plantado en ella, que suerte que su abuela no lo noto.
-Enid dejo la bebida y el platillo en la mesita de noche, para así, con sus manos arrastrar el flequillo de la pelinegra hacia arriba, para luego besar su frente como muestra de cariño-
-La joven Addmas dejo un suspiro, agarrando su capucha y comenzar a vestirse para que la mayor de la familia no lo note tanto-
-Mon Cheri~- es lo ultimo que hablo la azabache, para luego besar a su novia
"La Caperucita Oscura y la Loba Feroz", se habían enamorado.
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