****🌼****
Japón, 1978.
Querer aplacar los sentimientos e ignorarlos, no significa que cambie la realidad, no funciona de este modo. No tapas el sol con un dedo para que deje de existir, sigue brillando calurosamente ahí cuando lo retiras; igual que el color blanco no cubre del todo los rayones de colores en la hoja, o que el fuego no esfuma todo, porque incluso las cenizas quedan en donde yacía antes un incendio.
–Lo siento, no puedo corresponderte como te gustaría, Ga-ram.
–¿Es por otra chica? ¿S-sientes algo más por una chica?
"Se trata de un chico, uno con preciosos ojos miel y brilloso cabello rubio, hoyuelos adorables en sus rellenitas mejillas tiernas. Un chico que besé meses atrás y a quien no dejo de pensar. Oh, y es mi mejor amigo desde niños" Yeonjun amargamente la corregía en su mente con aquello que no debe decir en alto.
Pero el no decirlo en voz alta, no implica que no fuese un hecho real.
Era jodidamente frustrante, mientras más lo evade, lo oculta y pelea contra aquel persistente sentimiento, más parece instalarse en su sistema.
En las cartas que se enviaban, lo dos fingían, en las pocas llamadas que comparten hay silencios tensos y risas incómodas que antes solían ser de sincero y genuino goce. No lo soporta, detesta esa situación, y por si fuera poco también debe tolerar el que jovencitas como Kim Ga-ram se le confiesen y por ello tener que partirles el corazón, con todo y sus esperanzas; el hecho de observarlas llorar por su rechazo o hasta recibir bofetadas de chicas lastimadas, todo es sumamente exasperante y triste.
En casos peores, desde su perspectiva, debe que esquivar un posible beso, precisamente como aconteció dos minutos atrás.
–No, no se trata de una chica... No eres tú el problema – "soy yo" odia usar aquella carta cliché, se la prefiere callar. Suspira tendido, como tantas veces hacía últimamente – Lo siento, espero podamos seguir siendo amigos cuando lo creas conveniente, Garam...
Lo que más le hacía martillear la cabeza posterior a tales escenas, es que no tenía forma de saber si Soobin estaba pasando lo mismo que él, si el rubio estaría saliendo con una chica o si las rechazaba también, se cuestiona si es el único estancado, o si es posible que el menor tampoco pueda sacarse de la mente el beso que compartieron.
Y efectivamente, Soobin está en un momento similar con Haerin una vez la ojitos azules se le confesó luego de intentar conquistarle incesantemente. Le remuerde el rememorar cómo la hirió al explicarle que no era correspondida, el cómo ella intentó sonreírle entre lágrimas antes de correr a casa con su abuela. Quiso frenarla antes, debió desde el inicio ser sincero, pero no era capaz de herirla, y realmente creyó que ya pasaría, que sería un flechazo pasajero... Se equivocó rotundamente, y ahora lamenta en demasía haber perdido a su amiga, porque ya casi no cruzaron más palabras luego de aquello, por más que trató de disculparse, terminando resignado y dándole el espacio que ella buscaba.
Soo observaba su cuaderno de bocetos, aquel que le regaló el mismo chico al que ahora dibujaba en cada oportunidad, casi como un instinto de su alma, ya conociendo cada rasgo de su rostro, ese al que soñaba en diversas oportunidades y plasmaba con soltura, era un hábito. En él se grabó el tacto de sus labios, esos que quemaba con culpa y anhelo desde hace meses.
Los dos luchan contra la realidad de lo que su ser quiere, actúan como si nada pasara entre ellos, cada día siendo más pesada la carga. Lo podían ocultar del resto, pero no de sí mismos, y probablemente es eso lo peor: Porque no se engaña al corazón ni a la cabeza.
![](https://img.wattpad.com/cover/331461521-288-k794949.jpg)
ESTÁS LEYENDO
* Daydream * YeonBin (Yeonjun & Soobin, TXT)
Fanfiction***🌼*** Me haces soñar incluso cuando es de día, cariño. Cada día, Yeonjun espera ansioso la mejor parte de sus vacaciones de verano, su encuentro en el prado con su persona favorita: Choi Soobin, el hijo de su profesor de piano en aquel pueblito j...