𝐎𝐧𝐞 𝐬𝐡𝐨𝐭.

I'll be your friend to the end!

Cinco Hargreeves • One Shot.

Recuerdo correr con ______ por los árboles de los parques más grandes de la ciudad. Recuerdo su risa y su cabello, el viento pasaba por este a medida que corría. Era perfecto oírla reír mientras corría detrás de ella para querer atraparla.

---- ¡Espera, espera! ---- cansada pidió y se detuvo ----. ¡No me toques aún! ---- entre jadeos pidió.

---- ¿Quién dice?

---- Yo. Las reglas son... ---- antes de seguir hablando sobre las aburridas reglas que siempre me recordaba seguir para jugar limpiamente, le toqué levemente el cabello mientras reía ----. Eso no se vale, estoy diciendo las reglas.

---- ¿Y tú crees que no me las sé? ---- alcé una ceja, fingiendo indignación.

---- No. ---- negó.

---- Aún no habías dicho, "para", entonces esto cuenta como si aún estuvieras jugando. ---- no me tardé ni medio segundo al comenzar a correr cuando dije aquello. La conocía bien y también sus intenciones.

---- ¡Espérame Cinco! ---- fue lo único que pude escuchar a lo lejos, apartir de ese instante, corrí entre los árboles, no tenía un destino específico. Mi única motivación para correr era pensar que estaba en una invasión zombi en la cual tenía que escapar a toda velocidad.

Ignoraba los gritos de ______ llamándome detrás de mí, ni siquiera estaba consciente de lo lejos que me había ido y a dónde me iba. Entonces me detuve, de repente ella se dejó de escuchar, los pájaros cantar también y de un momentito a otro, el día soleado y lleno de alegría, se había convertido en una noche solitaria llena de miedo.

Llamaba a ______ por todas partes, trataba de volver por el camino en el que había venido, pero no, ella no me respondía y cada vez me preocupaba más el saber que ya era de noche y ambos estábamos en el parque más grande de Nueva York.

Caminaba, corría, trotaba y llamaba su nombre, pero mi vista sólo estaba llena de ramas y árboles por aquí y por allá. Estaba más que todo confundido. ¿Por cuántas horas corrí para que de repente se hiciera de noche? ¿Dónde estará ______? ¿Ahora cómo haremos para tratar de salir de aquí? De seguro mi padre estará preocupado porque aún no llego a casa.

Pero mi prioridad en ese momento no era mi padre, sino ______. Ella me preocupaba más por el hecho que se podía perder fácilmente en bosque. Aunque era mejor no hablar tanto, pues fui yo el que se perdió primero antes que ella. Pero, esta vez, es de noche, y en verdad creía que estaba asustada por la oscuridad.

Cuando hallé el camino de nuevo al centro del parque, una ola de felicidad me invadió. Ahora así sería más fácil buscarla. Tal vez me escucharía mejor, supiera que estoy en el centro del parque y tanto a ella como a mí, saldríamos del parque.

Después de llamarla y esperarla por más de unos minutos, me emprendí en hallar el camino al blanquito en donde teníamos nuestras cosas. Una idea llegó a mí al pensar que ella me estaría esperando ahí. Así que, ya cansado, con sed y la piernas que sentía que me iba a caer en cualquier momento, comencé a caminar mientras tarareaba su canción favorita, y así fue como me traté de relajar en el camino al banquito; mi técnica era simple: patear cualquier piedrita que se cruzaba en el camino, ver la luna y seguir tarareando su canción. Sentía que podía oírla y me la sabía desde el derecho al revés.