La víbora y el mito

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-¿QUÉ MIERDA?- La luz natural de un hermoso sol apuntaba directo a su cara, alguien se había atrevido a abrir la ventana- ¡MAMA! ¿SE PUEDE SABER QUÉ HACES?- Una Enid entera despeinada y tratando de cubrirse los ojos había salido de entre las sábanas para despedazar a quien hubiera osado despertarla. La empresaria agarró un almohadón para tirárselo a su madre, pero la señora Sinclair lo esquivó con habilidad.

-No contrato a un hermoso entrenador musculoso para que me entrene en vano, hija mía- Le explicó esquivando el segundo almohadón.

-Pero mamá, tenemos sueño!- "¿Tenemos?"

-Ya es hora de despertarse, Enid, son la una y el almuerzo va a estar listo dentro de poco - Anunció con una voz melódica la mujer.

-Mamá, no tenemos quince años para que nos vengas a despertar para ir al colegio- Vaya a saber por qué la rubia hablaba en plural. La cara de desconcierto de la mujer mayor habló por si sola.

-"¿Tenemos sueño?" "¿A despertarlas?" ¿A ti y a quién más? ¿Acaso dormiste con alguien, Enid? A tu padre no le va a gustar nada- Levantó su ceja mostrando que era una habilidad que se transmitía de generación en generación.

Enid frunció su ceño - Espera un momento... .- Giró su cabeza rápidamente inspeccionando la habitación en la que estaba - Yo no me acosté en esta cama, me acosté en la del cuarto de invitados con... con Wed... ¡WEDNESDAY!- Saltó de la cama más rápido de lo que su madre en su vida la había visto hacerlo.

-Si hubiera sabido que Wednesday iba a hacer que te levantaras tan rápido la hubiera levantado a ella primero - Le dijo su madre aguantando la risa.

-No es gracioso, mamá - Protestó Enid buscando en su maleta algo para ponerse - Esa maldita pelinegra siempre se sale con la suya, le advertí que no me cambiara de cama - Por lo poco que había visto, el día iba a estar hermoso para disfrutarlo en la piscina, por lo tanto, agarró su bikini rosa chicle, que era su preferido y dejaba mucha piel al descubierto, iba a hacer sufrir a Wednesday por desobedecerla una vez más. Se metió al baño para cambiarse. Su madre la siguió, pero se quedó al otro lado.

Al parecer Esther iba a pasarse el día entero con su ceja levantada - No sabia que dormían juntas- Fue una pregunta disfrazada de afirmación. La señora Sinclair sintió ruidos en el baño y esperó paciente a que su hija saliera a responderle.

-No lo hacemos- Contestó apenas salió - Es decir, si dormimos en la misma cama, pero solo dormimos y generalmente nos separa una montaña de almohadones - Explicó todo lo que podía sin referirse al miembro de la pelinegra mientras se cubría el bikini con un simple vestido de playa blanco.

-¿Y anoche no lo hicieron?- Esther agitó su cabeza ante su mala elección de palabras - Es decir, ¿Anoche no durmieron juntas? Porque tú estás en tu habitación y ella...

Enid se tapó su cara con sus propias manos y se tiró suspirando en su cama - Es... es complicado- Dijo.

-Enid....- Su madre de verdad quería ayudarla.

-Es muy complicado- Repitió - Todo con Wednesday parece costarme el doble- Agregó sincerándose ante su madre - Anoche, antes de los fuegos artificiales, hablamos - Además de otras cosas que su madre no necesitaba saber- Y la sentí más cerca que nunca, mamá, pero a la vez...

-A la vez muy lejos- Completó Esther logrando que su hija le diera la razón.

-Después, entre Yoko y sus dramas alcohólicos, Divina y su llanto inconsolable y el resto de los invitados, fue imposible que siguiéramos hablando y la perdí de vista nuevamente- Contó- No la encontré hasta que papá me dijo que la había visto entrar a la casa.

No Soy Para Ti  (WenClair Adaptación)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora