REY PROMETIDO (KOOKV)

11. PARK SEO-JOON

Jefe de la Guardia Real, Park Seo-joon dejó su hogar a la tierna edad de 15 años y se enrolo en el ejército del Rey. Su niñez había sido dura y pobre, debido a que Yunga, su padre, casi no se ocupaba de su hogar, dejando prácticamente en el abandono a él, a su madre y hermano.

Yunga llevaba una vida descontrolada desde joven , su dinero lo gastaba en mujeres y cantinas, pese a pertenecer al ejército, no era nada serio y siempre encontraba la forma de despilfarrar lo poco que ganaba en vez de cuidar de su familia.

Las campañas lo mantenían alejado de su hogar por tiempos prolongados, pero al volver a su casa, golpeaba e insultaba a su esposa e hijos por cualquier cosa, y ellos le albergaban mucho resentimiento.

Seo-joon, al ser el mayor, muchas veces tenía que enfrentarse a su padre para defender a sus seres queridos y siempre llevaba la peor parte.
Seo-joon tenía duras cicatrices en el cuerpo que indicaban lo mala que había sido su niñez y su adolescencia en casa, lo que lo orillo a huir de ella y enrolarse en un grupo de soldados que cuidaba las fronteras, con el ánimo de alejarse lo más que pudiera de su padre perverso.

Debido a lo inclemente de la zona donde paso su juventud, se hizo muy fuerte y serio. Aprendió rápidamente y se convirtió en uno de los soldados más reconocidos por sus superiores y hasta sus enemigos sabían de sus grandiosas habilidades al pasar los años. Luego fue llamado a formar parte de la Guardia Real y salvaguardar palacio y a sus ocupantes.

Participó de campañas de conquista y junto a los soldados élite del reino y ganó mucha experiencia desde muy joven y viajo por distintos lugares aledaños al reino.

Mientras hacía un viaje largo de retorno a su hogar, luego de alguna de esas campañas de conquista, la compañía con la que avanzaba se encontró con algo bastante horrendo y triste.

El reino vecino del Agua, un reino pacífico y alegre, que vivía a orillas de lagos y cascadas, que su sustento eran los frutos del bosque y la pesca, habia sido cruelmente atacado de noche, y aprovechando la oscuridad, habían masacrado a toda la familia Real, desde adultos hasta niños, así como a casi todos los aldeanos que trataron de defenderse.
Fue un ataque sorpresa que los encontró indefensos, y aún cuando su guardia trató de defenderse, se dice que fuerzas oscuras intervinieron para que el ataque fuera tan certero.

Había cuerpos regados por todo lugar, muerte por todos lados, llantos de mujeres y moribundos quejandose, todo era un caos de sangre y lágrimas

Ellos ingresaron a palacio para ver si habría algún sobreviviente, pero no encontraron nada. Buscaron entre escombros y cuerpos, pero el castillo había sido incendiado y poco o nada quedó de él, más que muerte y desolación.

Cuando él ya se estaba retirando, escucho un lamento muy bajito, casi como un animal herido. Trato de buscar entre los restos del área de sirvientes del palacio y encontró a una doncella de palacio cubriendo con su cuerpo a un niño de 3 o 4 años. Ella seguía viva pero muy mal, aún así sostenía firmemente al niño.

Se notaba que ella formaba parte de la servidumbre de palacio a juzgar por su ropa, aún cuando el niño era verdaderamente bello.

Este lloraba desconsoladamente junto al cuerpo de la mujer, y solo repetía Tete y mamá, lo que le hizo asumir que esa mujer era su madre.

Él lo recogió y lo cubrió con su capa de soldado, y mientras lo subia a su caballo y seguía la marcha. Casi nada quedaba por hacer más que avisar a palacio lo que habían presenciado y tratar de ubicar a los responsables.

Llegando a palacio, al ser un niño huérfano no lo quiso llevar a su casa y exponerlo con su padre, así que lo entrego a una mujer de palacio que trabajaba muchos años allí.

Incluso se hizo cargo de algunos gastos del pequeño dándole dinero a la mujer para que se hiciera cargo, sabia que al menos en palacio iba a estar más protegido que afuera, en el mundo exterior.

El niño creció y se volvió un hermoso doncel, de hermosa figura y rostro angelical. Pero el cocinero de palacio le prohibió mostrarse frente a los soldados o nobles que llegaban de visita, así que todos veían solo un niño andrajoso caminando por palacio y nada más.

Pero Seo-joon sabía como en realidad era Tete, pero también lo quería proteger. Por ello se molesto mucho con su padre cuando supo lo que había hecho. Ese jovencito estaba bajo su proteccion y nunca dejaría que su padre lo toque, jamás...