. CAOS

52 14 4
                                    

Un sentimiento no muy agradable llegó al pecho del menor de los Jeon. Así que debería tomar esa colección por la fuerza e ir a venderla a Japón como ya lo había prometido.

El sabia perfectamente como haría una gran distraccion para poder tomar cada una de las valiosas piezas de la galería sin que nadie se diera cuenta.

Con ese perverso pensamiento salió del edificio de Jungkook. Fue a su departamento y llevó a cabo su bien pensado plan.

Los Park salieron del restaurante, la señora Jeon asombrosamente se había comportado como toda una dama, a pesar de que la entrañas se le hacían añicos, pero su otro hijo la dejó ahí y no quería molestar de ninguna manera al dueño de la galería y hacer uno grosería a sus padres lo seria para cualquiera.

Se despidió amable de ellos, a Jimin dio un enorme abrazo y casi gritando le dijo :

-Bienvenido a la familia Jeon.

Los Park miraron la escena orgullosos, Jungkook era un gran chico, su pequeño Mimi sería muy feliz con el.

Pero todo fue una actuación de la madre del prometido del pintor, al tenerlo tan cerca su voz cambió en su oído.

-Dije que no los quiero juntos, y veras la manera tan sublime como te iras de la vida de mi hijo - le dijo la mujer que aun no estaba enterada de la laptop desaparecida y que el hijo que la abandono en ese lugar, creía que habían cambiado lo que él escribió.

Los Park fueron a la galería donde en último piso estaba la residencia de los hermanos, y obviamente había una habitación para sus padres cuando venían a verlos.

Le enseñaron una nueva parte de la galería que resultaba ser el estudio del prominente escritor.

-Debo decir que hoy dormiré como bebé,- dijo el señor Park.

-Y muy complacidos, solo nos falta que Yoongi encuentre una pareja para verlo sonreír tan hermosamente como Jimin sonríe ahora mismo. - la señora Park también dijo esperando la respuesta del hijo mayor.

-Madre mi vida es esta galería, el día que llegue alguien que aprecie el arte tanto como yo. Que ame las pinturas de Mimi como yo lo hago. Cuando alguien me diga que le gusto yo mas que todo esto y mi corazón lata tan de prisa que pareciera que se iría corriendo a otro país. Ese día cambiaré de opinión. - finalizó diciendo Yoongi yendo a su oficina.

-Disculpalo querido cada vez que menciono algo así, se enoja. - apenada dijo la señora Park.

-Lo se no se preocupe - contestó el escritor.

-Los dejaremos descansar madre - Jimin tomó la mano de Jungkook y salieron de la habitación.

Con los Jeon las cosas no iban muy bien. La madre llegó claramente molesta por haber sido abandonada en esa situación.

-Se puede decir que carajos haces, por que me dejaste con esa gente - ella vio que el hablaba por teléfono pero no le importó.

Después de mas de una docena de llamadas al fin soltó el aparato. Ella parada frente a él con los brazos cruzados esperaba una explicación.

-Madre, creo que nos descubrieron. Fui a casa de Jungkook, su estudio está vacío. Y las cosas no están saliendo como lo escribi. Así que tengo la forma ideal para obtener la colección, tu esperarás en el auto y..............

Los planes fueron explicados. La mujer estuvo de acuerdo, lo harían justo al día siguiente. La cita con el japonés ya estaba para las últimas horas de la noche.

Jungkook muy a su pesar volvió a su casa esa noche, no podía invitar a su querido novio, sería una grosería llevárselo estando sus padres ahí, pero también sería una falta de respeto quedarse el.

Cúando abría la puerta un joven alto se acercó a él.

-Jungkook, tu hermano estuvo aquí hace algunas horas. Estuvo unos segundos y se fue muy enojado.

-Hola Namjoon, sabía que volvería, el no te dijo nada - Jungkook dijo a su vecino.

-No, el no me vio, pero si vigilamos que no llevara nada - Namjoon le comentó.

-Lo que él quiere el la laptop que me estas guardando mientras tu la mantengas a salvo. Estaré bien. - Jungkook dijo muy seguro.

-Entonces de mi caja fuerte no saldrá hasta que tu lo digas. - el alto y dormido joven le dijo al escritor.

-Ven pasa, tengo algo para ti, se que son los favoritos de Jin. - Jungkook señaló que entrará.

Fueron directo a la cocina, en la mesa estaba un recipiente muy grande tapado con una muy colorida servilleta.

Jungkook entregó el recipiente completo al vecino.

-Pastelillos que mi tío envió de Estados Unidos. El insiste en mandarme como si vendiera. Solo tomé dos. - dijo Jeon entregando el objeto. - se que Jin los ama, y tu no te quedas atraz.

-Vaya que hoy recibiré un buen masaje gracias a ti - dijo sonriente Namjoon.

-En todo caso iré por mi masaje yo mismo - dijo riendo el escritor.

-Mejor me iré, jamás tendrás las prodigiosas manos de mi esposo en tu cuerpo - Tomo sus pastelillos y huyo de esa casa.

"Gracias" escuchó Jungkook que el vecino gritó antes de cerrar la puerta.

Los perfectos dientes del talentoso escritor salieron a relucir de la alegría que le daba hacer enojar al vecino.

Antes de dormir, envió mensajes a su novio, los cuales eran respondidos de inmediato.

Durmieron ambos con sus respectivos teléfonos en la mano, recién se acaban de separar y ya se extrañaban.

En la mañana Jungkook abrió sus ojos, algo se sentía extraño. Su sueño fue tranquilo, por primera vez no soñó con la misteriosa mujer de negro. Lo cual fue placentero.

Se duchó, vistió y de prisa salió hacia la galería, que por los últimos días había sido su refugio todo el día. Ahí estaba todo lo que lo hacía feliz, un hermoso novio, un cariñoso hermano, pinturas bellas y dos padres que lo trataban con respeto y amor. Más que su propia madre.

Llegó a la galería, sorpresivamente vio mucha gente afuera, muchos reporteros esperaban a alguien. Jungkook no entendía que pasaba, tal vez otro robo.

Llegó y entró de prisa, adentro Yoongi se volvía loco caminando de un lado a otro. No sabía por qué había tanto reportero, temía que algo pasara justo ahora que sus padres estaban ahí.

Una chica reportera entró tímida a la galería.

-Señor Yoongi, puedo comentar algo con usted - la joven se dirigió sería al dueño de la galería.

-Dime niña, vamos a esta sala, - entraron a una magnífica sala con puras obras famosas, duplicados autorizados sólo para esa galería.

-Woow, tenía muchas ganas de venir a esta galería, pero el trabajo no me ha dejado últimamente. - comentó ella.

-¿Te gusta el arte? - preguntó el dueño de Min.

-¿Gustarme? Amo la pintura, esta por ejemplo, es una de mis favoritas - ella señaló Nenúfares de Monet.

-También me encanta, pero amo sin condiciones las de....

-MIMI - dijeron a la vez...

-Pero señor Yoongi. Me gusta mas usted. Por eso me atreví a entrar antes. - Ella le dijo acercándose peligrosamente. - Hemos sido convocados porque el este lugar nos dirían la identidad del pintor MIMI...






LA VIDA DE UN ESCRITOR Donde viven las historias. Descúbrelo ahora