Luna Páez
Estaba en el coche de Liam de camino a su casa, pero no paraba de pensar en todo lo que había pasado. Me parecía surrealista lo bien que había empezado el día y lo mal que estaba yendo en ese momento. Ya había llamado a Raul para decirle que había tenido un problema y que ni tenía ninguna foto de la publicidad, ni ninguna foto del entrenamiento, y no. no le dije la verdadera versión de como me había quedado sin ellas. No se ni como no me envió a la mierda, por una vez en ese día tuve suerte y Raul solo me dio un aviso, pero al siguiente estaba de patitas en la calle. Sin embargo, con la cámara no tuve mucha suerte, me iban a hacer pagarla, la verdad es que preferí no preguntar el precio y esperar hasta que me dieran la factura, ya que llevaba demasiado disgusto como para otro. Se me había olvidado mencionar que dejamos mi ordenador en una tienda de informática para ver si podían arreglarlo o por lo menos recuperar las cosas.
Llegamos a la mansión de Liam, era preciosa, era como ocho veces mi casa. Entramos en el garaje para aparcar el coche al lado de los otros siete coches que no podría pagar ni trabajando cinco vidas.
-¿Quieres hacer algo en especial?- me pregunto mientras que bajamos del coche
- Necesito despejarme, solo pido eso- le respondí sabiendo que en menos de cuatro horas iba a tener que ver seguramente al canario otra vez. Tenía una sensación horrible, por un lado quería ir a buscarlo y abrazarlo durante horas, pero por el otro lado, quería que él me se diera cuenta de lo que había hecho y dicho, me buscara y que me pidiera perdón.
- Podemos hacer tortitas si te apetece-me dijo sabiendo que me iba a encantar la idea
- Me gusta- le dije ofreciéndole una sonrisa, aunque por dentro estuviera echa una mierdad
- Ven aquí- me dijo abriendo sus brazos para que le abrazara. No me lo pensé ni un segundo, me tiré a sus brazos. Solo tres personas consiguen que sus sus abrazos me sanaran y una de ellas era Liam
- Gracias por todo- le dije entre sus brazos
- No es nada- me respondió y me separe de él, entonces añadió- Si quieres te llevo donde el bus de Pablo, os despedís y luego me quedo a dormir en tu casa
- Liam tienes un viaje a la mañana, tienes que descansar- le dije mientras que empezábamos a caminar
- No pienso dejarte sola en tu casa, te conozco demasiado para saber que te puedes pasar toda la noche despiertas pensando en todo. A la mañana si quieres me acompañas al aeropuerto- me dijo mientras salimos del garaje. Liam era maravilloso, todos deberíamos tener una persona como en nuestra vida, y por suerte yo la tenía. Sin embargo, Pedri no lo aguantaba, bueno no es que no lo aguantara si no que él tenía incrustado en la cabeza que Liam estaba enamorado de mi y que se iba a acabar liando conmigo.
- Liam no te vallas nunca en serio- le dije y enlace nuestros brazos para andar como dos abuelitas
- Irme nunca va a entrar en mis planes- me respondió mirándome a los ojos y dijo antes de dijera cualquier cosa- Prométeme que si estos dos días que vas a estar sola, necesitas algo me vas a llamar a mi o a Pablo
- Te lo prometo- le dije riendome ya que me lo dijo en un tono como si fuera una niña pequeña prometiendo que no me voy a comer las chuches
Estuvimos como dos horas para hacer unas tortitas con chocolate y nata, ya que entre que empezabamos a pelear con la harina, entre que haciamos el tonto, entre que se nos quemaban.. Me lo pase genial cocinando con él pero igualmente no podía quitarme al canario de la cabeza, mi cabeza solo tenía preguntas sin respuestas. Ni siquiera sabía si él era consciente de todo lo que había hecho, pero supuse que si ya que se lo había contado a mi hermano mientras que el estaba con Pedri y conociendo a Pablo, él no se iba a quedar sin abrir la boca. Faltaban menos de dos horas para que los chicos cogieran un bus hacia el aeropuerto, rezaba para que cuando llegara al lugar el viniera a hablar conmigo y así arreglar las cosas para no se fuera hasta otro continente sin ni siquiera hablar las cosas. Liam note como me empecé a apagar otra vez y me hizo jugar al Just Dance para concentrarme en los bailes y no en lo que me estaba concentrando. Lo logró, Liam era tan malo jugando ese juego que no podía hacer otra cosa que reírse. El tiempo pasó volando, ya teníamos que irnos para que me diera tiempo de despedirme de mi hermano.
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Mis fotografías favoritas [Pedri González]
Fanfiction[PRIMERA PARTE DE UNA BILOGÍA ÉRAMOS DOS] Luna tenía semanas desde que consiguió sacarse el título de grado medio de imagen y sonido, sin embargo, su mellizo, más conocido como Gavi, ya le había conseguido un puesto como fotógrafa del primer equipo...