Capitulo 40

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Harper

- ¿Cómo te sientes? –Pregunta Delia.

-Terrible –Contesto antes de volver a vomitar, Delia me sujeta el cabello y pone su brazo en mi hombro.

Ayer llegue a su casa, destrozada, me sentía muy mal por todo lo que había pasado, estuvimos hablando 1 hora, me desahogue con ella, pero sentí que eso no era suficiente, así que empezamos a tomar alcohol, primero fue un vaso, después tres, y ya después solo tomábamos de la botella. Acabamos tiradas en el suelo, y todas esas decisiones nos llevan a este preciso momento en el cual estamos sentadas en el piso en frente de la taza del inodoro porque despertamos con una resaca infernal.

Me doy una ducha rápido y me pongo una playera azul marino y unos pantalones que me prestó Delia. Bajo a desayunar, Delia prepara sus famosos Hot Cakes de avena y un batido de almendra y plátano.

Todavía tengo náuseas, pero mi estómago necesita alimento.

-Se supone que el batido te ayudará con la resaca –Dice mientras voltea un panqueque con una pala de cocina.

Doy el último trago del batido y pongo el vaso en la mesa. Cuando las dos ya terminamos de comer, agarramos nuestras cosas y salimos de la casa. Mi cabeza me duele mucho, es como si me estuvieran martillando el cerebro, me tomo una pastilla para aliviar el dolor y así poder seguir con nuestra travesía.

Tenemos que encontrar a Ethan, antes de que sea demasiado tarde. Estoy consciente de todo lo que hizo mi padre, pero no puedo dejar que lo mate.

Tocamos en la puerta de su "casa", pero no obtenemos ninguna respuesta. Me masajeo la cabeza frustrada y cierro los ojos, pero los vuelvo a abrir cuando el sonido de una puerta abriéndose llega a mis oídos. Delia abre la puerta y me sonríe.

-¿Cómo lo... -Pregunto.

-Es mi truco de magia en las fiestas –Me guiña el ojo, se vuelve a poner su pasador en su cabello y entra.

Entró después de ella, miró alrededor, todo sigue igual, digo, ¿porque tendría que cambiar? Una parte de mi pensó que Ethan ya se había ido, pero sus cosas siguen aquí, su computadora sigue aquí. Sonrió maliciosamente y me acerco a ella, la prendo y me encuentro con un fondo de pantalla totalmente negro, muy simple para mi gusto. Pero mi sonrisa se borra cuando me doy cuenta que está bloqueada, la computadora necesita una contraseña.

-No podremos saber nada. –Digo

-De hecho, si podemos –Dice Delia. - Conozco a alguien en el pueblo que puede ayudarnos a desbloquearla.

- ¿Enserio?

-Sí, pero tal vez tome tiempo.

-Y eso es justo lo que no tenemos –Recargo mi cabeza en la pared y suspiro, pienso por unos segundos en una solución y como si bajara del cielo, se me ocurre una idea. - ¿Y si rastreamos su teléfono?

- ¿Tienes su número?

-Sí, y estoy casi segura de que él tiene su ubicación prendida.

- ¿Y qué tal si no? Todo lo que me contaste indica que es una persona que no quiere ser encontrada.

-Exacto, pero ¿y si está en peligro no crees que él querría que alguien supiera dónde está? Ponte a pensar, mi padre mató a su padre, Ethan tiene miedo de acabar de la misma forma, Grayer quiere matarlo y quiere que parezca un accidente, o mucho peor no quiere que nadie encuentre el cuerpo de Ethan, y es por eso que tal vez él tenga su ubicación prendida.

-Me parece coherente, hagámoslo. –Delia agarra la computadora, y me mira fijamente, un destello de tristeza brilla en sus ojos.

-Tus irás a desbloquear la computadora, y yo iré a buscar a Ethan.

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⏰ Última actualización: Jan 13, 2023 ⏰

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Oscuridad © (Borrador)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora