Rosa espinoza
...
Apenas el auto se detuvo, el pelinegro descendió y sin mediar palabra alguna, se dirigió de inmediato a los dormitorios. El calor que recorría su cuerpo no parecía normal y menos una simple fiebre.
Quizás la maldición había tenido algún efecto en él, pudo haber sucedido en un momento de distracción. Entro al baño y se desvistió, al instante se sorprendió.
Lo que creyó que había sido un tatuaje falso hecho en broma había cambiado, las raíces se habían extendido más y estaban llenas de espinas, sus ojos incrédulos inspeccionaban cada detalle.
Antes era pequeño, pero ahora se había extendido, cubría su hombro y rozaba su cuello, le parecía inédito, no entendía como algo así había aparecido en su cuerpo y tampoco si se trataba de algo dañino.
Luego iría con Iori para que lo revisara. Se metió a la ducha y manipulando la temperatura consiguió un agua tan fría digna del polo norte. En cuanto está hizo contacto con su cuerpo, sus bellos se erizaron y un escalofrío lo recorrió.
Había un extraño contraste entre la frialdad del agua y el intenso calor que desprendía su cuerpo, pensó que quizás eso lo aliviaría, pero tenía la sensación de que estaba hirviendo, se aseo rápido ya que por un momento creyó que se ahogaría con el vapor.
Apagó el agua y tomo su toalla, mientras secaba su cuerpo, notó como su rostro estaba enrojecido, no lograba comprenderlo.
¿Qué sucedía?.
En cuanto paso la toalla por su abdomen sintió un escalofrío, el mismo se alojó en su parte baja, lo tomo desprevenido y la reacción que tuvo su cuerpo terminó por desconcertarlo.
-¿Qué mierda me pasa? -un jadeo salió de sus labios, llevo sus manos a su boca, eso había estado fuera de lugar.
Comenzó a sentir la inquietud del despertar de su miembro, tenía la fuerte sensación de descargar aquella adrenalina que lo recorría de pies a cabeza, se sentía una antorcha humana, su cuerpo estaba tan caliente que se sofocaba.
Otro jadeo, estaba seguro de que no era normal lo que le sucedía y no quería sucumbir ante el deseo carnal que azotaba su cuerpo virginal. Su mente comenzaba a hacerle malas jugadas al imaginar situaciones subidas de tono, nunca había tenido ese tipo de pensamientos.
Sintió como aquella parte palpitaba furiosa ante la falta de atención, pero Megumi no estaba seguro de hacerlo, nada le aseguraba que así podría calmarse. Cómo pudo, ingreso nuevamente al baño y encendió el agua a baja temperatura.
Quizás su frialdad ayudara a detener aquello que le sucedía, más grande fue su sorpresa al ver que nada sucedía, su miembro seguía erecto y juraba que había una gota de pre-semen asomándose allí.
La desesperación se hizo con él, quería sentirse bien, su mente solo podía pensar en lo deliciosa que sería la fricción de su mano en su falo, lo fuertes que serían los espasmos y lo increíble que sería el orgasmo.
Inhaló y exhaló, estaba perdiendo el control de la situación, su cuerpo le pedía a gritos que hiciera y deshiciera, tan solo quería recibir una pronta atención. Mordió con fuerza su labio inferior, no tenía mucha experiencia en ello.
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Nocturnal <(HIATUS)>
FanfictionLas noches de Megumi eran tranquilas, lo eran, pues repentinamente, una visita que no era bien recibida comenzó a acompañarlo en la oscuridad.