La vida secreta de la novia

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*Uuuhhh!*

La sirena sonó luego de dos días y los técnicos se pusieron en alerta cerca de la fisura. Algo se estaba acercando a toda velocidad y cuando atravesó a este lado, chocó contra la pared provocando una humareda.

-Coff coff! Qué mierda?! Daster? Es Daster!!!-

-Llama a un médico rápido!- al ver a su compañero ensangrentado y con la ropa destrozada, pensaron lo peor

-Está muerto!- Stone se puso histérico

-Ya quisieras malnacido. Arghh! Bloqueen...la maldita fisura...esa cosa venía tras de mí!!!- apenas pudiendo sostenerse, Daster gritó

Todos se pusieron de acuerdo para colocar el bloqueador y evitar la salida de lo que fuese que estuviese siguiendo al rastreador

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Todos se pusieron de acuerdo para colocar el bloqueador y evitar la salida de lo que fuese que estuviese siguiendo al rastreador.

-Qué pasó?!-

-Cuando llegué, habían cientos de cadáveres esparcidos y...esa cosa....quiso comerme...me arrojó lejos...Agarré mi aeromoto y huí...era gigantesco!- la cara de los técnicos fue de consternación

El médico llegó a la escena y al ver la aeromoto estrellada y al rastreador malherido, lo atendió rápido.

-Lo llevaremos a la enfermería, avisa a Canna sobre esto y que preparen a los cazadores. Esa cosa sigue allí y no debe salir!-

-A la orden jefe. Lleven esa porquería a desguace!- Stone negaba con la cabeza

-Oye imbécil, si tocas mi aeromoto te mato! Me costó miles de créditos tunearla, es mía. Déjala en el taller y dedícate a lo tuyo!- Daster mostró su lado arrogante

-Ya lo oyeron. Déjenla en el taller hasta que le den el alta al infeliz- Stone se cabreó y pateó la aeromoto

Mientras se la llevaban, Daster observaba preocupado la parte del sillín desmontable.

**
Una vez dejaron la aeromoto en el taller, las luces se apagaron y pude salir.

Daster había rellenado la caja dentro del sillín con su abrigo y la de los cadáveres para que cuando chocara, amortiguara el golpe. Me metió dentro y me juró que me sacaría de la fisura si seguía sus instrucciones para luego llevarme con mi madre.

Hasta el momento, había cumplido su palabra y debía continuar con el plan. Me señaló en un papel, como acceder al baño del taller y donde hallar la llave de apertura sin ser vista por las cámaras.

Una vez fuera, caminé por el pasillo con la ropa que robé entre tanto buscaba la enfermería. De repente, un sujeto con rastas y gafas de sol se me acercó furioso.

-Quién eres y cómo entraste? Esta es un área restringida solo al personal!- me tomó fuerte de la muñeca y le dije lo que practiqué

-Mi novio me llamó y vine a verlo pero me perdí cuando crucé la zona de embarque! Dijo que estaba en la enfermería muy malherido. Tengo que verlo!- me quedó mirando fijo

La Razón por la que me casé contigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora