"Lo hice para salvarte y lo haría de nuevo sin arrepentirme."
Si le decía eso, mi esposa no me creería por eso cerré la boca y le dije que fue amor a primera vista aunque eso...tampoco era mentira.
Con tal de evitar que cayera en manos del supuesto...
-Ahhh! Mueve la camioneta!- gritarle a Gia no surtía efecto
Al arrancar la camioneta para ir a un costado, otra lluvia de estacas llegó del cielo. A este paso moriríamos sin poder ir a casa a cumplir nuestro sueño de vivir en paz.
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Al estacionar en un garaje, el terremoto se hizo más fuerte y la causa caminaba buscándonos. Un monstruo humanoide que lanzaba las vigas de una construcción como dardos, usaba su nariz para olfatearnos.
-Oye, cuando esa cosa se distraiga enciende el vuelo y llevátelos.-
-Phin, qué estás haciendo?!- mi mamá lo agarró
-Seré la carnada mientras huyen. Con saber que están a salvo me basta...perdón por todo y ruego sobrevivan- cerrando la puerta, salió afuera
-No, regresa!-
-Oigan, no quiero ser portador de malas noticias pero...- señalando arriba, Gia pidió que saliéramos
Había una fisura en el cielo que iluminaba todo y seguía agrandándose. Por lo ocurrido no caímos en cuenta que ya era de noche pero seguía claro como el día. Lo peor es que otras cosas estaban escapando y horrorizada se me paralizaron las piernas.
Mi mamá no paraba de llorar al ver a mi padre queriendo enfrentarse a esa bestia disparándole y cuando lo lanzó contra unos autos, gritamos para que regresara.
Padre quería que huyéramos pero fue imposible cuando en otro ataque, se alejó con el brazo herido. Como pudimos, corrimos a traerlo de regreso y ocultarnos.
-Estoy bien! Por qué no huyeron?!!!-
-Ni pienses que vamos a dejarte. Arranca de una vez!!!- gritándole a Gia, mamá se sacaba la rabia
Estábamos duras del miedo y el llanto no ayudaba nada. Gia tratando de encender la camioneta, nos gritó también pero ocurrió algo que nos hizo lanzar un alarido.
-Ahhh Dios mío!-
-Dash!!!-
Levantándose como un muerto resucitado, nos quedó viendo confundido en tanto, escupía la sangre en su boca.
-Tust! Ahora vuelvo- tomando el rifle del asiento de acompañante, se dispuso a salir
-Qué haces?! Detente o morirás!!!- lo sujeté de la pierna
Alzando su mano, comenzó a contar con los dedos y sus palabras más que estúpidas, se escucharon espeluznantes.
-...Cuarta...quinta vez que ocurre lo mismo. Sky, no me retrases, solo tengo media hora-
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