GYM [Enzulian]

Capitulo V.

Salgo del baño después de veinte minutos con sólo una toalla en la cintura y mi cabello húmedo.

Mensajes.

Enzo:
Voy en camino.

Lauty:
Ok, eu... Tengo un problema.

Enzo:
¿Por qué? ¿Están bien?

Lauty:
Sí, pero Licha invitó al nuevo vecino a escuchar nuestra música.

Enzo:
No hay ningún problema seguiré siendo uno de los primeros.

Lauty:
No lo entendes Enzo, el chico es... Chica(?) Ay no sé, Licha no se explica bien qué es. El punto es que es gay ¿Vas a poder soportarlo? ¿O queres ser el segundo en escuchar la canción?

Enzo:
Demasiada información en un solo texto.
¿Preferis tocar la canción para aquel imbecil primero que a mí?

Lauty:
A ver, Enzo. No lo llames imbecil. El chico es genial, lo conocí en la cena, debes darle una oportunidad a la gente. Veni esta noche, por favor.
Visto 03:39 p.m.

Tomo mi ropa y me cambio rápido para luego comer un poco y salir de mi casa.

Iría en auto pero la casa de Lauty me queda solo a unos veinte minutos caminando así que realmente sería algo exagerado.

Mientras camino no puedo evitar pensar que los homosexuales y todos ellos cada vez están más en el planeta y en cuán más mal vamos ¿Qué será del futuro de los niños y niñas? No pueden crecer pensando que eso es normal... Porque no lo es.

-¡Enzo!-Grita Licha mientras entro por la puerta de la casa.

-¿Si sabes que puedes tocar el timbre y yo te voy a abrir? -Pregunta Lauty.

Yo me tiro en el sillón y niego con la cabeza.

-No es mi culpa que siempre tengas la puerta abierta.

-¡Te encantará la nueva canción! -Grita Licha y de inmediato escucho el sonido de la licuadora encendida.

-Mierda, Lisandro. -Digo por mientras que no me escuchan.

-¡Gatos del mundo bendigan este licuado!-Vuelve a gritar levantando el envase.-¿Queres un poco, Enzo?

Me dice con una sonrisa y aunque en realidad no quiero asiento con la cabeza. El licuado tiene un color café y a decir verdad él siempre mezcla cosas raras.

-Vamos abajo. -Dice Lauty.

Lisandro toma tres vasos de licuado y todos bajamos al sótano donde veo todos los instrumentos preparados y un sillón al frente.

-Me gusta el logo.

-Licha me dijo que debía ser rosa, no me culpes.

Rosa.

-Deberíamos prepararnos, Julián llegará en cualquier momento. -Aconseja Licha.

-¿Julián? -Pregunto-. Me suena familiar.

-Es el nuevo vecino, recién se inscribió a la escuela en la que enseñas. -Me informa cuando conecta el micrófono-. Pero no creemos que juegue fútbol en absoluto. -Ríe un poco.

La concha de su madre.

Corro arriba y me asomo por la ventana, viendo a Julián cruzar la calle con unos jeans ajustados claros y una mochila rosa pastel.

-Me lleva la...

-¡Enzo! -Grita Lisandro a mis espaldas.

-¡¿Qué?! -Grito volteándome.

-Ey tranquilo, ¿Qué tenes?

Estaba por responder cuando el sonido del timbre suena y Lauty camina hacia la puerta con una sonrisa en el rostro.

-¡Hey, Julian! Pasa. -Dice una vez que abre la puerta.-¿Ves Enzo? No tardo mucho en abrir la puerta.

El castaño entra tímido tomando las correas de su mochila y balanceándose sobre sus talones.

-Tocaremos en el sótano Julián, ¿Queres un poco de licuado?.

Julián ríe un poco y finalmente levanta la mirada, viendo a todos en la habitación hasta llegar a mí, donde instantáneamente borra su sonrisa.

-E-Eh... No quiero molestar. -Dice volviendo su vista a Lisandro.

-Ni lo digas, pequeñín. Ven, vamos.

Mueve la cabeza en dirección al sótano y Álvarez pasa a un lado mío con la cabeza agachada y mordiéndose el labio.

Inhalo profundo y aprieto los puños cuando veo a Lauty mirarme con una sonrisa burlona.

-¿Es el mismo chico de la escuela?

Asiento con la cabeza.

-No, Lautaro, no aceptaré estar aquí con él.

-Basta, Enzo. Me estoy hartando.-Quita su sonrisa y me mira enojado-. Me importa una mierda tu homofobia, es una persona.

-¿Si quiera lo conoces?

-¿Tú sí?

-No, y no quiero hacerlo. Está enfermo.

-¡Deja de hablar así!

-¡No quiero pelear!

-¡Entonces andate! -Grita abriendo la puerta de golpe.

-¿Qué?

-Que te vayas a la mierda, Enzo.-Aprieta sus puños y se acerca a mí.

-¿En serio vas a preferir a ese imbecil antes que a tu amigo de la infancia? -Pregunto.

-No, Enzo. No es por Julián, ¿Qué acaso crees que no lastimas a Lisandro? Es mi mejor amigo, incluso sobre pasándote a ti. Es mi amigo al igual que tú, pero no dejaré que lo lastimes.

-A él no le estoy haciendo nada. - Respondo molesto.-

-¿Qué carajos, Enzo? ¿Crees que no escucha nuestra conversación justo ahora? Sólo nos separan unas escaleras.

-Sabes que a él lo soporto.

-¡Pero no se trata de él! ¡Se trata de que no puedes querer a un gay y odiar a otro, suena racista!

Volteo a atrás, viendo a Julian y a Licha observándome, Lisandro con decepción y Álvarez con miedo y tristeza.

Le dedico una sonrisa burlona a Julián y luego me río un poco para pasar al lado de Lautaro, golpeándolo con el hombro y salir de la casa azotando la puerta.

∆Todo lo que ocurre en esta historia es ficcion∆.

Que fácil es odiar a Enzo¿No?