praise | kooktae

👾19

La omega les había invitado unas bebidas apenas atravesaron la puerta de su oficina.

—Tu debes ser el famosísimo Taehyung— dijo mientras se acercaba a rodearlo con sus brazos, Taehyung intentó corresponderle con cuidado de no volcar la botella abierta en sus manos—. Soy Nayeon, la manager y algo así como la madre de Jungkook en algunas ocasiones.

—Apenas eres 8 años mayor, mamá.

Taehyung estaba un poquitín encantado por la extrovertida omega mayor, lo que sintió cuando vio la amabilidad reflejada en los ojos que se toparon con los suyos era algo que no sabía como explicar, simplemente era algo cálido.

—Mucho gusto, señorita Nayeon— saludó con un poco de timidez.

—¡Ay!, es que ya te amo— chilló abrazándole por los hombros otra vez.

El omega regresó el abrazo y conectó miradas con Jungkook, sin saber qué es lo que había hecho.

—Nayeon ya es toda una señora, casada y con una hija, así que te ama porque le dijiste señorita— explicó.

—Cállate Jungkook, apenas tengo 29—. Reclamo con el brazo aún en los hombros de Taehyung.

—¡Casi una década mayor que yo!.

—¡Apenas son un par de años!—. Nayeon soltó un golpe en el brazo del alfa por el cual él ni se inmutó.

Taehyung rió viendo cómo se gritaban y jaloneaban, tomando un sorbo de su botella, vió como seguían discutiendo como niños con golpes que se notaban eran totalmente inofensivos.

Supo entonces que la omega era completamente amigable y que, definitivamente, ya le caía muy bien.

—Bueno, Taehyung—. La omega llamó su atención con el llamado y notó que ya habían terminado con la inofensiva discusión que mantenían.—¿Qué quieres comer?.

—Lo que ustedes quieran esta bien para mi.

—¿Seguro?—. Preguntó Jungkook mientras se posicionaba a su lado y le pasaba una mano por la cintura, cuando el omega asintió, rápido le dijo a Nayeon que cualquier cosa también estaba bien para él.

Nayeon se tragó sus pensamientos intrusivos que le rogaban burlarse del ahora alfa dominado.

—Okay, obligaré a Jimin y Yoongi que vuelvan por comida por llegar tarde.

Una hora más tarde, unos suaves toques y murmullos los sacaron de la platica que mantenían, solo Nayeon presumiendo a la pequeña Naeun, fotos en pañales hasta del primer día del preescolar.

—¡Abraaaaan!

—Ese muy seguramente es Jimin— le susurró Jungkook aprovechando la cercanía para acercarse a su mejilla y olisquear el ligero olor a vainilla que siempre acompañaba al omega.

—¿Qué trajeron?—. Fue lo primero que se escuchó después del sonido de la puerta al ser abierta.

—Nos traje a Min y a mi, un saludo primero al menos, por favor— reclamo dejándose quitar las bolsas de las manos.

El omega en el sillón se puso de pie apenas vio como los recién llegados comenzaban a quitarse los zapatos en el recibidor. Hizo amago de ayudar a Nayeon con las bolsas antes de que el alfa se le adelantara y lo hiciera por él. "No te preocupes", le susurró.

Taehyung sonrió, tenía la costumbre de ser totalmente independiente pero, ahora, de repente sentía el amor en todos los poros de su cuerpo. Que bien se sentía ser amado.

—¡Holaa, tú debes de ser el desafortunado omega que está con este feo alfa!—. Taehyung rió bajito, todos siendo inconscientes de la única chica en la habitación quien había comenzado a abrir las bolsas y a sacar la comida.