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Haileen Steinfeld como Jayah Green.
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Aiden Rowan como Aberama Gold.
Él acariciaba mi cabello con ternura, su sonrisa resplandeciente iluminaba la caravana en la que nos encontrábamos.
— ¿Bonnie? — susurre estirando mi mano hacia su rostro.
Acaricie la piel tersa y suave de su mejilla, mis lágrimas se acumulaban reacias a salir y el nudo en mi pecho apretaba con fuerza impidiéndome respirar.
— Te amo, cielo, nunca lo olvides. — dijo él para luego besar mis labios.
— ¡Despierta! Debemos irnos. — exclamó Gold sacudiendo mi cuerpo.
Me levante con rapidez observando mi alrededor sin entender que sucedía, esperaba ver el rostro de Bonnie junto a mi, esperaba que todo lo que habíamos vivido hasta el momento sea la pesadilla y no aquella visión divina de mi amor visitándome entre sueños. La carpa en la que me encontraba era pequeña, apenas entraba estirada en el suelo. Salí de ella observando a Aberama colocar granadas en las tiendas y la caravana junto con el mayor de los Shelby. Fruncí mi ceño sin entender, él volteo hacia mi y me ordenó que subiera al auto.
Pareció tan real, aun sentía el beso en mis labios, el calor de su piel sobre la mía, las caricias en mi cabello. Me estaba volviendo loca de dolor, ya no quería sufrir de aquella forma. Era más piadoso que esos malditos bastardos de los Billie Boys me torturaran hasta morir que seguir viviendo así.
Aberama y Arthur subieron con rapidez al automóvil, lo puso en marcha y huimos del lugar sin dejar pista. Oímos la explosión a lo lejos, Gold sonrió, lo pude ver a través del espejo. Había una pequeña esperanza que Jimmy hubiera sido el que voló por los aires, pero lo dudaba.
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— ¿Porque estamos aquí? — cuestione observando la lujosa Oficina en la que nos encontrábamos.
