𝘼𝙢𝙖𝙧~ ʀᴇᴍᴜꜱ ᴊ. ʟᴜᴘɪɴ.

Piedra Filosofal

Amelia: Señor Flamel...

Narra Amelia

Terminando el receso de las fiestas, Nicolas Flamel me visita donde los Potter tal como acordamos por carta.

Flamel: Por favor, usted debe tener la piedra, señorita Brown
Amelia: Lo sé, pero tengo solo 16 años ¿le parece lo hablamos cuando tenga 50?
Flamel: La profecía no dice a los 50
Amelia: Tampoco a los 16
Flamel: Pero estará a salvo, si la recibe, no caerá en las manos equivocadas
Amelia: Créame, si eso pasa, lucharé por eso
Flamel: Lo sé, es tu trabajo según la profecía –silencio–. Mire dama de la muerte, soy el fabricante de esta piedra, sé de lo que es capaz... solo tómela y cuando se ponga de 50 comience a hacer elixir de la vida, haga la posion y el secreto, no se lo diga a nadie, el secreto es
Amelia: No me lo diga! señor Flamel, hagamos esto, yo mantendré a salvo la piedra sabiendo que está con usted, pero en serio, ahora mismo no puedo aceptarla
Flamel: Usted es muy testaruda ¿verdad? Cuando la piedra caiga en malas manos, piense en este momento y se arrepentirá –desaparece–
Amelia: Genial ahora un viejo de más de 500 años me odia
James: –entra a la sala– se fue ¿ como salió? ¿tienes la piedra? déjame verla!
Amelia: No la tengo Jamie, algún lo haré, pero no por ahora
James: bien entiendo ¿por qué te molestas conmigo?
Amelia: No estoy estoy molesta, solo que –suspiro– ahora un señor legendario por su creación me odia
James: ¿y qué te importa? es solo un viejo amargado, que se vaya a la mierda
Euphemia: James!
James: Lo siento
Amelia: No te preocupes, vámonos ya es hora de volver a hogwarts –medio sonrío–

Más tarde en el tren, salí del vagón que compartía con mis amigas y me fui a buscar el carro de dulces para comprar un par de chocolates. El pasillo iba lleno y me encuentro con Remus de frente y el me esquina y sigue su camino como si me hubiese visto.

Amelia: ¿Me estás evitando, Remus?
Remus: Ah –se voltea y me ve–, oh Amelia! no te ví –sonríe y se va–
Amelia: que mierda

Compré los chocolates y en ves de ir con mis amigas fui donde los chicos.

Amelia: Hola
James: Hola
Amelia: ¿Qué les pasa?
Sirius: ¿Qué quieres decir?
Amelia: No lo sé
James: Creo que estás paranoica
Sirius: Tranquila Amy, ven siéntate con nosotros –me siento a su lado–, relájate y olvida tus problemas por un rato
James: Creo que has pensado mucho el la piedra filosofal
Sirius: Debe ser eso, no te preocupes! –pone su brazo sobre mis hombros– no mucha gente sabe que existe
Amelia: y ¿ qué si voldemort la quiere?
James: Es un idiota! ¿crees que sepa de ella? ni en sueños!
Sirius: Además ¿en serio creen que una chica de 16 va a poder con todo eso? na, tu tranquila ya llegará el momento
Remus: No te mates pensando en eso
Amelia: Hasta que te dignas de hablar!
Remus: ¿Qué te pasa? No he hecho nada
Amelia: Me ignoraste
Remus: Estaba pensando en cosas, no me di cuenta de que estabas ahí
Sirius: Oh problemas de matrimonio viejo
James: Remus, ¿como te atreves a ignorar a nuestra mejor amiga?
Sirius: Ey, dijo que estaba pensando –de pronto todos miraban a Peter–
Peter: ¿Qué?
Sirius: ¿De qué lado estás?
Peter: No lo sé
James: Bien! Amelia, seré tu abogado
Sirius: Y yo te defiendo a ti Remus
Peter: Oh ok, que comience la sesión –finge hacer un golpe con un martillo–
James: Mi clienta demanda al señor Remus John Lupin por ignorarla este día hace 10 minutos
Sirius: Mi cliente se declara inocente
Amelia: Oh Merlín, si que están aburridos, no seré parte de esto, lo judicial no es lo mío

Volví con mis amigas. Pasamos todo el viaje hablando chisme y comiendo chocolate.

Un día después, estaba en la orilla del lago leyendo cuando siento alguien parado enfrente, yo no quito mi vista del libro.

Remus: Ahora quien ignora al otro
Amelia: Oh Remus, no te vi
Remus: ja ja –se sienta a mí lado–
Amelia: ¿Qué tal estuvieron tus vacaciones?
Remus: Extrañaba mucho mi casa
Amelia: Te entiendo, yo la extraño, ya no quiero pelear con mis padres, aunque no fue malo pasar vacaciones con los Potter
Remus: Estarán bien, cuando termine el semestre iras a casa y se arreglaran
Amelia: Eso espero, no quiero estar sola, menos con todo lo que está pasando
Remus: Sola nunca estarás, nos tienes a nosotros
Amelia: No me gustaría arrastrarlos a todo eso
Remus: No hables estupideces –se ríe–. Ey escuché rumores que nos dejaran ir a Hogsmeade el fin de semana que viene y yo me preguntaba si... no lo sé, te gustaría ir conmigo
Amelia: Claro que si, ya sabes que las chicas son un poco aburridas cuando se trata de Hogsmeade
Remus: Claro pero, me refiero a ir conmigo, ya sabes talvez como una cita –cuando pronunció esa última palabra dejó de respirar como si esperase algo que dolería–
Amelia: Oh ¿me estas pidiendo que vaya en una cita contigo? –mi corazón extrañamente iba cada vez más rápido–
Remus: Ajá
Amelia: Me encantaría –el volvió a respirar–
Remus: Genial –sonrío aliviado–
Amelia: Necesito irme, te veo luego Rem

Me fui directo a buscar a Lily, una vez la veo corro hacia ella. Parece que ella también tiene algo que decirme. Nos abrazamos de emoción ambas.