Orden del fénix

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Narra Amelia

Era noche buena y cada uno estaba en su casa esperando que sea media noche para ir a la reunión secreta. Estaba terminando la cena con mis padres, veo el reloj con detalles dorados que se encontraba en la pared y me percato que ya iba a ser media noche, por ende finjo un bostezo.

Madre: Estás cansada ¿te quieres ir a acostar?

Amelia: Es recién media noche, no quiero arruinar la velada

Madre: No digas tonterías

Padre: Mañana podemos celebrar y a primera hora intercambiamos regalos

Madre: Y debemos conversar qué haremos con el juicio

Me ponía muy triste pensar en eso, esta podría ser mi ultima navidad con mi familia.

Amelia: ¿Es necesario hablar de eso? es deprimente

Padre: Si quieres ir donde James para año nuevo, debemos hablarlo antes que te vayas

Amelia: Aún no sé si iré con ellos

Padre: El mismo pidió que te dejemos ir

Amelia: Lo veremos después -me pongo de pie-, ahora aceptaré la oferta de ir a dormir, buenas noches los amo

Me fui hacia mi cuarto y al cerrar la puerta me detuve a ver todos los posters de bandas musicales que tenía en mis paredes, había estado tan ocupa que no he escuchado música en mucho tiempo y ya no sabía si Queen había sacado más álbumes. He cambiado mucho y tal vez nunca vuelva a ser la misma, ni siquiera mi cabello olía a chocolate. Quería llorar pero ya iba atrasada a la reunión, cerré mis ojos y me aparecí en la dirección que había anotado en mi agenda. Una vez llego al lugar estaban todos los chicos, sentados en la vereda y con una apariencia muy aburrida.

James: Finalmente! -se ponen de pie-

Remus: Pensamos que no habías logrado escapar de la cena

Amelia: Bueno, aquí estoy, entremos

Remus: ¿Te sucede algo?

Sirius: Luces triste

Amelia: Probablemente esta reunión sea algo serio, entremos ya

Entramos a la casa que tenía mal aspecto y por dentro parecía una casa abandonada, pero una vez llegamos a una puerta doble de roble se abre sola. El salón era completamente distinto, muy elegante y con buenas terminaciones; había mucha gente sentada conversando y discutiendo sobre algo que aparecía en el periódico.

Dumbledore: Ah! Bienvenidos, los estábamos esperando -nos guía hacia un sector en donde estaba Lily, Marlene, Frank, Alice y algunos otros compañeros de Hogwarts-

Amelia: ¿Qué hacemos aquí, señor?

Dumbledore: No seas impaciente, Amelia -me sorprendió que era la primera vez que me decía por mi nombre y no "señorita Brown"-. Les quiero presentar a un par de personas -se acercan tres personas-, bueno ya conocen a Minerva, el es Alastor Moody y este es Kingsley Shacklebolt

Kingsley: Estamos encantados de finalmente conocerlos, hemos escuchado maravillas de ustedes

Alastor: Y hemos leído bastante sobre ti en el profeta -me mira directamente a los ojos logrando intimidarme-

Amelia: Sigo sin saber que hacemos aquí

Alastor: No vengas con esa personalidad de hacerte la chica mala, somos aliados

Minerva: Niños, supongo que saben que está ocurriendo actualmente

Sirius: Claramente

Marlene: Tenemos una primera fuente -pone su mano en su hombro- ¿nos dirán sobre qué es todo esto o no?

Dumbledore: Debemos defender el mundo mágico y muggle de los planes de Voldemort, hemos estado reclutando magos

Kingsley: Y Dumbledore dice que son bastante talentosos

Minerva: Si que lo son! Talentosos, otros inteligentes, ingeniosos, hábiles y podría seguir toda la noche con cualidades de cada uno

Alastor: Todas esas cosas no valen nada si es que no son valientes, no nos sirve que entren en pánico si ven a un mortifago

Amelia: No entraremos en pánico

Alastor: ¿Estás diciendo que aceptas?

Amelia: De todos modos es mi batalla, tal vez es mejor que tenga un equipo

Dumbledore: No es solo un equipo, es la orden del fénix

Remus: Estoy dentro

James: Suena como un plan, detengamos a Tom Riddle

Sirius: Ese hijo de perra

Dumbledore: Nunca dude de ninguno de ustedes

Alastor: Arriba hay dos habitaciones con varias camas, vean como lo hacen

Amelia: ¿Camas?

Alastor: Ahora viven aquí, hasta que la guerra termine

Mi mundo se detuvo ¿no volvería a ver a mis padres? y tal vez para siempre. Los oídos se me taparon y disocie pero Remus me llevaba de la mano hacía a donde nos contarían más de los planes que habían próximamente. Lo único que contuve fue que para año nuevo tendríamos nuestra primera salida al callejón Diagon, que por lo que decían estaba hecho un desastre. Yo planeaba como me escaparía mañana para pasar tiempo con mis padres y decirles que no podré verlos por un largo tiempo, decirles que ahora era parte de la orden del fénix.

𝘼𝙢𝙖𝙧~ ʀᴇᴍᴜꜱ ᴊ. ʟᴜᴘɪɴ.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora