«Capítulo 6»

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Otro día lluvioso, está vez Piconjo estába limpiando su hogar ya que llevaba tiempo que no limpiaba, dejó que Evil siguiera durmiendo, de todos modos, no necesitaba ayuda, el piso de arriba tenía solo dos habitaciones, una de ellas la usaba como closet, la otra habitación la usaba obviamente como dormitorio por qué está tenía baño, lo bueno es que ya las había limpiado, solo le faltaba la sala juntó a la cocina, al cuál ahora estaba limpiando.

Debería limpiar más a menudo, soy un experto Se dijo mentalmente, había terminado de limpiar la cocina por completo, estaba viendo como nueva, aún que también miraba la bolsa con la cuál hecho todo el polvo, probablemente unos 5 kilos de polvo, no le interesaba saber cuántos kilos eran exactamente tomaba su habitación, si que tiró la bolsa dentro de otra para que el polvo no se escapará, para de una vez limpiar la sala.

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La sala finalmente limpia, la lluvia había bajado un poco así que aprovecho para tirar las bolsas, para regresar a su casa antes de que la lluvia llegará nuevamente a empeorar, una vez que entró a casa vió a Evil mirándolo como si estuviera esperando algo.

— ¿Eh? — Soltó por la sorpresa — ¿Que sucede? — Le preguntó, Evil solo lo observaba.

El silencio empezó a ser un poco incómodo, Evil mayormente se quedaba callado o solo hablaba cuando estaba apuntó de corregir e pedirle algo, aún que no solo lo observaba.

— ¿Que pasá? — Nuevamente le pregunto ya algo cansado del silencio.

— Secate... — Le respondió de forma seca y directa.

— ¿Perdón? — Le exclamó un poco confundido por esa respuesta.

Evil simplemente le apuntó el cabello, el cuál estába completamente húmedo hasta goteaba un poco de agua.

— Ah, sí. Ya voy... — Dijo una vez que entendió a qué se refería.

Una vez terminada la corta conversación, el pelinaranja se dirigió a su cuarto ya que este tenía el baño, cuando entró tomó la toalla y empezó a secarse el cabello. Sintió la mirada penetrarte de Evil nuevamente, al voltear vió al demonio en la puerta, otro silencio incómodo, Piconjo intentó ignorar la mirada, pero era imposible, ya que se sentía como miles de personas observandote, por unos momentos creyó que se había ido, hasta que otra vez la mirada del demonio hacía que su cuerpo temblará levemente.

— Toma... — Dijo el demonio rompiendo el hielo.

Trás mirar a Evil, esté tenía a mano ropas secas y limpias, probablemente en el momento en que se había retirado fue para buscarle la ropa de cambio.

— Gracias... Déjalo aquí, ya me cambio — Le agradeció el gesto amable, debe admitir que le parece lindo que le haya hecho un favor sin siquiera pedírselo.

El demonio dejó el cambio de ropa para así salír del cuarto, aún que una vez salió se recostó en la cama, se acomodó un poco por obra del frío se arropó. Mientras que Piconjo, terminaba de secar su cabello, de pasó ahora había terminado de cambiarse, cómo hacía algo de frío se puso un suéter morado oscuro y un pantalón negro obviamente para mantenerse caliente, le sorprendió que Evil le eligiera eso, y al mismo tiempo tampoco le impresionaba, puesto que la lluvia hacía que hubiera un frío. Salió del baño viendo a Evil en su cama, arropado, al parecer satisfecho y tranquilo, Piconjo suspiró para ver la hora.

Vaya, se me fue la hora. Bueno, tendré que cocinar Pensó Piconjo para ver al demonio muy tranquilo en la cama.

— ¿Quieres algo de comer? — Preguntó sacando al demonio de sus pensamientos.

«Ritual Erróneo» Piconjo X Evil BoyfriendDonde viven las historias. Descúbrelo ahora