Un viaje a la luna

Promesas por cumplir

Thomas me hizo compañía casi toda la semana, pero justo ayer vimos una noticia que me dejó helado, la válvula de escape si había sido lanzada, solo que no sabían si había alguien en ella.

Esa era la esperanza que necesitábamos todos, a lo que nos aferrábamos en cada segundo.

-El partido es pasado mañana papá, ¿crees poder ir? -Me dijo mi hijo mientras me agarraba de la mano, por situaciones de que alguien había incendiado la escuela, mi hijo estaba disponible el viernes y había decidido dejar la cafetería en manos de los muchachos e ir por un helado.

-No me lo perdería Félix, además, será la final, debes estar nervioso. -Nadie nos decía nada sobre la válvula de escape, la NASA ni siquiera contestaba las llamadas y por esa misma razón, tampoco quería que Félix se enfocará solo en eso.

Sin embargo, no le puedes pedir a un niño que no piense en su padre.

- ¿Crees que venga ahí? -Me preguntó mi pequeño, mientras yo solo lo miraba asintiendo, con una ligera sonrisa falsa. -Tricia dice que tener esperanza está mal...

-Tricia está asustada amor, es normal que actúe así.

Caminamos un rato hasta que encontramos a una persona la cual me dejó helado, maldecí por mis adentro, esto era el maldito colmo.

Enfrente de mi casa estaba el papá de mi esposo, su papá biológico.

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Oficialmente lleva 2 años separado de Craig, sin embargo, éramos muy buenos amigos, de los mejores que había y también era mejor amigo de Thomas, después de un tiempo su relación no me molestaba tanto, aunque en algunas ocasiones de verdad había querido ser Thomas, pero desde que Pete se me confesó de la forma más hermosa del mundo en la fiesta Halloween de South Park, sentía que mis sentimientos por Craig ya no existían.

Era navidad, la nieve caía tranquilamente en mi casa, mientras yo me quedaba viéndola desde mi ventana, mis papás no estaban, había ido a trabajar y todos mis demás amigos estaban es sus fiestas.

Odiaba sentirme solo, más por que mi novio estaba en un campamento de verano, estúpidos padres conformistas.

-Dios, me escuchó como él. -Dije riendo cuando de pronto volteé a ver las calles y vi que Craig estaba caminando solo, parecía muy enojado.

Dude en irlo a ver, pero debía comportarme como un buen amigo.

- ¿Qué haces por aquí Tucker? -Dije con una media sonrisa saliendo de mi casa con una chamarra verde cubriéndome casi todo, de verdad estaba haciendo frío.

Craig se volteó a verme un poco impresionado, y después a ver todo el lugar, estaba claramente confundido, aunque yo lo estaba más por que no venía mas abrigado de lo normal y estaba haciendo muchísimo frio.

- ¿Cómo es que putas llegue aquí? -Su voz sonaba molesto y me reí, a veces hablaba como Thomas.

-Se te pego el síndrome de Tourette o por que las groserías. -Intentaba hacerlo reír, pero él solo me vio molesto. -Okay, nada de bromas, ¿Por qué estas enojado?

-Mi padre biológico, fin del asunto.

Y es que el papá de Craig se llamaba Thomas, sin embargo, su verdadero padre, un hombre llamado Abraham que era una mierda de persona lo había estado acosando últimamente, estaba harto, ya lo había golpeado y recuerdo que entre yo y Clyde habíamos logrado separar con muchas dificultades.