Flashback
Sus manos estaban a una temperatura equilibrada... pero sus sentidos no.
Ambas mujeres respiraban al compas, aceleradamente pero con una sensación de tranquilidad enmedio de ese momento de suma excitación, mientras Mildred pasaba el pincel mojado por su piel, delineando su silueta.
Fin del flashback
°°°
Habían pasado muchos días llenos de momentos que Natasha jamás pensó que viviría. Quizás solo en sus sueños.
La compañía de Mildred le había traído solo cosas buenas. Su carrera iba en auge y ultimamente siempre obtenía cualquier personaje que deseara.Una de las tantas noches que paso en casa de la pelirroja al fin ocurrió aquello que supo esperar... y es que dicen que la paciencia es virtud de sabios... y Natasha lo sabía perfectamente.
Esa noche el frío calaba en los huesos pues era pleno invierno en Newyork. Los villancicos resonaban por las calles y la nostalgia envuelta en felicidad se sentía en el ambiente. La joven había olvidado lo que era pasar una navidad en familia... y tenía recuerdos vagos de esa sensación pero no le daba demasiada importancia. Por la tarde había recibido un mensaje de Mildred que le decía que la esperaba en casa para cenar. Obviamente acepto de inmediato con una sonrisa boba en la cara, en cuanto terminó sus clases fue a su casa para ducharse y arreglarse. Siempre había sido algo vanidosa y se enfocaba en cada detalle para sentirse y verse bien así que cuando se fijo en le reloj ya pasaba de las 10:00 pm. Corrió a toda prisa hacia la estación del metro.
Tenía algunas llamadas perdidas y temia que pensara que no quería cenar con ella. Intento llamarla pero no respondía. El metro tardo otra media hora en llevarla hasta su destino.
Caminaba agitada por las aceras de piso desigual y su aliento casi parecia congelarse al contacto con el aire gélido. Llegó a la puerta y tocó despacio esperando con paciencia a que le abriera. Nadie respondió.
Volvió a tocar ahora con más fuerza y pasados unos minutos apareció ante ella una imagen casi divina. El cabello cobre caía ondulado en una coleta, sus ojos maquillados de sombras oscuras que le hacían resaltar el color y sus labios de color rojo intenso le formaron una sonrisa.
—Oh eres tú!
—C-claro quien más iba a ser?
—Creí que no vendrías... anda pasa que hace frío
—Perdón... no me di cuenta de la hora y...
—No te preocupes ya estas aquí, para la próxima acepta que yo vaya a recogerte
—Sabes que odio molestarte.
—Ya te he dicho que no me molesta.
Natasha cerró la puerta se quitó el abrigo café y lo colgó en el perchero del pasillo mientras la pelirroja se alejaba casi presumiendo esos tacones rojos que resonaban en el piso de cerámica. La joven sonrió admirando su belleza y la siguió hasta el comedor.
—Mira te traje esto.
Saco de su bolso dos botellas de vino rosa y una caja de chocolates con relleno de crema que tanto le gustaban a la pelirroja.Mildred le sonrió emocionada, odiaba admitir que amaba los regalos.
—Cariño no debiste... pero gracias!
Le dio un beso en la mejilla.
—Ahora acompañamos la lasaña con este vino que seguro esta delicioso!Juntas alistaron la mesa, enseguida se dispusieron a cenar y entre platicas amenas y risas se terminaron las dos botellas... Natasha sabía controlar su inestabilidad de alcohol pero no supo en que momento el vino terminó sabiendole a agua. Su risa salía sin forzarse y solo podía ver a la mujer sonriendole de vuelta como si hubiesen ducho un chiste.

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Suspiro
RomanceDicen que la vida es un camino circular en diferentes alturas, puede que si cruzas por algún lugar pronto volveras a pasar por ahí pero tal vez con mas aprendizajes. Pero que pasa si en ese camino encuentras a alguien que como tú se siente atrapada...