Me dejaste de amar,
Me dejaste de hablar,
Me dejaste de llamar
Y a mi corazón tuve que acostumbrar.
Las frías noches,
Alejadas de tu calor,
Se volvieron inolvidables
E insoportables
El simple echo
de no poder hacer lo que quería,
Era algo que sin duda alguna
Me retenía
Aprendí a amar,
Aprendí a llorar,
Aprendí a mirarte a esos ojos color café
Mientras mi corazón se acuchillaba a si mismo,
manteniendo aún un atisbo de fe
Fe de que volverías,
fe de que lo arreglarías
fe de que nunca me olvidarías,
ni que nunca te marcharías
Ahora, cada vez que oigo tu nombre
Se me revuelve el estómago
Y mi cuerpo suda frío
Más no por el temor
de querer acordarme de ti
Sino por la emoción de pensar,
que volvería a funcionar.
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Poemas e Historias para no cortarse
Historia CortaUna recopilación de pequeños poemas y relatos cortos, la mayoría de ellos son sobre la salud mental, ansiedad, depresión, TCA o TDAH. A parte de eso, esto es una recopilación de absurdas ideas o pensamientos míos, normalmente los que no me dejan dor...