𝓔𝓵 𝓬𝓸𝓶𝓲𝓮𝓷𝔃𝓸 𝓭𝓮𝓵 𝓬𝓪𝓶𝓫𝓲𝓸

4.

Hola, mucho gusto, les escribe su autor agradeciendo la aceptación que a tenido el libro, no pensé que si fuera a gustar
Y gracias por eso, bueno, nos vemos en la próxima.

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—¿Que carajo acaba de pasar?—

-Los tres hermanos de la tortuga "menor" estaban en el cuarto del temperamental, después de ver qué no había nadie en la guarida el de bandana morada y el azul fueron con el temperamental ya que sería el cuarto menos pensado que su padre los buscará -

— Chicos, ¿enserio sucedió que Mikey ganó contra Rapha? —

— Por lo visto si...¿En qué piensas Rapha?—

-Raphael tenía la mirada perdida, aunque con el llamado de Leonardo lo volteo a ver con el rostro serio-

—Nada intrépido—

—Rapha ¿Como fue que Mikey te ganó?, Ni siquiera vi que se detuviera incluso a esquivar—

—No lo sé nerdo, fue como si él estuviera en un automático, como si ya lo hubiera hecho otra ocasión o siempre —

-Leonardo solo escuchaba a sus dos hermanos, algo seguía sin cuadrar, eran las mismas rutinas de siempre, pero había algo que cambio, no sabía que pero lo podía notar-

—Era como sí él fuera..—

—Otra persona—

-Donatello volteo a ver a su hermano y líder, Raphael había hecho algo similar pero su rostro tenía la sorpresa impresa -

—Tambien lo noté, es el mismo, pero tiene algo diferente, aunque como te pateo el trasero fue glorioso—

-Donatello solo trato de no reír a carcajadas, había sido intenso y gracioso ver la cara de su hermano contra el suelo, el temperamental soltó un gruñido de disgusto cada vez se arrepentía menos de haberle hecho la broma a Mikey-

—Pues no me interesa, ya tengo mi venganza planeada y con eso estaremos a mano—

-Donatello solo hizo una mueca de disgusto, le ponía incómodo estar enterado de las bromas, así que solo se despidió diciendo que tenía otras cosas que hacer, ya fuera de la habitación del de bandana roja, le pareció ver por el rabillo del ojo, a su hermanito, encerrarse en su habitación, decidió pasar antes de ir a su propia habitación -

-Pego su cara a la puerta tratando de oír algún ruido, no parecía que hubiera alguien, pero la luz debajo de la puerta lo delataba, quizás estaba llorando y se durmió, entonces solo se apartó y se encerró en su habitación -

-Mientras tanto el temperamental y el intrépido líder estaban en una guerra de miradas, Raphael ya casi estaba nervioso, un pequeño vistazo su frigobar fue suficiente para que Leonardo quitará el contacto y fuera a este abriendo el refrigerador, viendo al pequeño gatito de helado-

—¿Esta es tu venganza Rapha?—

-Miro el rostro de su hermano, quien se veía apenado pero molesto-