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"Es tu culpa..¡ES TU MALDITA CULPA!, ¡TE ODIO!"


- Meditar...eso estaba haciendo, meditar....oh más bien eso intentaba, tenía la mente revuelta y ante eso, siempre era mejor escuchar lo que pensaba-

-Hagamos una lista sencilla para repasar-

-Desde hace unos doce días que seguía despierto, los chicos se turnaban para pasar tiempo con el y cuidarlo, ya estaba mejor, aún sentía el cuerpo pesado pero solo eso, aunque le costaba mantener un poco el equilibrio pero ya estaba recuperando lo-

-Casey olvidó casi media semana, aunque por ser casi "igual" de descuidado que él, no le tomaron importancia-

-April se enteró de su salida, aún que no el porque real, le dijo que era por qué necesitaba estirarse, solo paseo nocturno, no pregunto más y le dio razón-

-Spike y gatito helado se hicieron buenos amigos, los había estado presentando durante esos días, pero desde ayer que los saco se encontró la graciosa escenita de Spike llevando arriba en el caparazón a gatito helado en su traje-

-Hasta les tomo una foto, ahora la tenía de fondo de pantalla-

-Siguiendo la lista, los demás salían a patrullar en ocasiones mientras él se quedaba meditando junto al sensei...-

-Se estaba volviendo algo sensible a las presensias, nada del otro mundo, ahora podía sentir con más claridad las emociones de su familia, dónde estaban...-

-Y era caótico-

-Sentia peor los cambios de ambiente y lo colocaba tenso, no sabía cómo detenerlo-

-¿Cómo paso eso?, Pues bien, un día meditando, solo tocó un poco su alma al verla agrietada, sintió tristeza de si mismo, pero su alma se volvió de una intensa luz y salió de su meditación casi hiperventilando-

-Tal vez debería hablar con el Sensei, explicarle que le pasa...después de todo él estaba a su lado sentado..-

-Pero también se sentía más conectado con su alrededor, podía escuchar el aire que pasaba, sentir los bichos que habían, por algún motivo se sentía más conectado con todo-

-Hasta el grado que sintió como su alma se quería agrietar demasiado..-

-Se sentía débil muchas veces, pero otras tan lleno de vida, era una montaña rusa, bajaba y subía, le cansaba, lo agotaba espiritual, física y mentalmente-

—Sensei..—

-Su padre lo volteo a ver con lentitud, era el único que lo ayudaba a 'bañarse', desde que estaba así ocupaba nuevamente el baño compartido, no lo bañaba como tal, solo lo ayudaba a llegar-

—¿Si, hijo mío?—


-Ambos estaban meditando, sentados y en silencio con el odioso sonido de ese puntero extraño parecido a un reloj que siempre le colocaba, incluso de niño, como detestaba ese sonido...Tak...Tak...Tak....-

—Me he sentido más conectado al mundo espiritual..tengo la preocupación de que eso pueda afectar me—

—Lo he notado—

-Miro a su padre confundido y algo extrañado-

—¿Puede hacer algo para ayudarme?, Tal vez algún conocimiento de nuestros antepasados pueda ayudar—

𝓔𝓵 𝓬𝓸𝓶𝓲𝓮𝓷𝔃𝓸 𝓭𝓮𝓵 𝓬𝓪𝓶𝓫𝓲𝓸Donde viven las historias. Descúbrelo ahora