Strangers

Strangers- ¿Capítulo Final?

Narrador Omnisciente

Es bien sabido aquello que dicen los adultos es cierto: "Disfruta tu vida", "atrévete", "te arrepentirás si no lo haces", "las decisiones de hoy son consecuencia en el futuro", "equivocarse está bien, pero no te equivoques dos veces con lo mismo", "utiliza condón", "no aceptes nada de desconocidos o aquellos que ya consideras amigos".

Pero nunca hacemos caso, o en algunas ocasiones lo dejamos pasar porque creemos que somos invencibles, que a nosotros no nos pasará.

Pero, ¿qué sucede cuando la situación se sale de tus manos? Cuando las malas decisiones acompañan tu día a día, cuando tienes relaciones sin protección, cuando vuelves a tropezar con la misma roca…

Las malas decisiones, o aquellos arranques de "valentía" eran los que desencadenaron momentos irreparables en la vida de algunos.

Daniela Calle yacía tendida en la camilla de la sala de urgencias donde comúnmente andaba de un lado a otro, corriendo, gritando y ayudando a todo aquel que cruzaba la maldita sala de urgencias. Aquella que era fiel creyente de no esperar "un día tranquilo" en la sala, porque sabía que aquello sólo traería caos. Mismo caos que comenzaba a tomar el control de su vida, sin saberlo, sin sospecharlo un poco.

Camila Cabello observó el rostro de su mejor amiga, de aquella a la que consideraba una hermana; luego miró a los padres de ésta y corrió para refugiarse en aquellos dos pares de brazos que, desde que conoció a Daniela, le dieron seguridad. Ningún médico le permitía revisar a Daniela debido a la cercanía que había entre ambas, no querían que por algún motivo algo saliera mal y Camila pierda la razón y su capacidad de comprender que "la paciente está en problemas".

Aún así no se rindió. Con ayuda de una enfermera logró obtener información que sólo los médicos sabían, la doctora Daniela Calle tenía programado un ultrasonido, solamente que el ginecólogo en turno estaba en una operación.

—Yo me encargo, por favor.– Pidió al doctor Robinson, jefe del hospital.

El hombre solamente miró a Camila antes de suspirar sonoramente y asentir. —Doctora Cabello…– la llamó. —Le pido que mantenga la calma, la doctora Calle es importante para todos pero sabemos que para usted es como su hermana.– él apretó el hombro de Camila y ésta asintió, se alejó luego de decir "estaré tranquila, no se preocupe".

En los baños de la sala de emergencias, otra disputa se llevaba a cabo. Y es que por la cabeza de Laura solamente pasaba la frase "sabía que andar con ella traería problemas" mientras intentaba hacer que Valentina Garzón, la hermana menor de su mejor amiga que seguía llorando, entrara en razón.

—¡Es que ni siquiera es una infidelidad!– se defendió Laura.

Valentina abrazó su cuerpo sintiendo como todo a su alrededor se movía. No era justificación pero no había dormido en días, no comía demasiado y solamente había buscado a Laura para poder sentirse un poco mejor. Pero abrió la boca y dijo cosas que no debía, lo sabía; pero ¿qué esperaban de ella si solamente estaba dolida? Si todo a su alrededor comenzaba a desmoronarse con facilidad.

—Basta, por favor…– susurró mientras se pegaba más a la pared. —Lo siento, Laura, ¿sí?– susurró con dolor.

—¡No! ¡Es que no puedes venir aquí a reclamar cosas que no son de tu incumbencia! ¡¿Vas a seguir llorando?! ¡Por Dios, Vale! ¡No eres una niña!– continuó gritando.

Y aunque a Laura no se le podía justificar su actitud, igualmente cualquiera comprendería el dolor y la impotencia que ésta sentía. —Valentina, tu me engañaste.– recordó, había bajado el tono de su voz pero aún se notaba aquel astibo de rabia y rencor. —Me engañaste por mucho tiempo, me hiciste quedar como estúpida delante de tu hermana, de tu padre y el resto del mundo.– Laura caminó por el baño. —¿Sabes cuántas noches soñé con estar a tu lado? ¿Sabes cuántas ideas pasaron por mi cabeza y todas terminaban conmigo mudándome a Italia para estar más cerca de ti? ¿Sabes lo que sentí cuando mi mejor amiga comenzó a ignorarme por salir con su hermanita? ¿Sabes lo mucho que me atormentaba saber que tu madre podría odiarme aún más?-