T.D.U.M (Trasmigración de una madre)

21_ Problemas

Ning- hay algún nombre que te guste? No puedo seguir llamándote pequeño por siempre ¿verdad?

-Aniel.

Ning- Aniel, es un buen nombre.

Lo dejo por un momento mientras busco el piyama de tigre que prepare para él y me termino sorprendiendo el resultado, adorable, ¡un pequeño tigre adorable!

Ning- bueno Aniel, será mejor regresar o Zamora comenzará a incomodarse y no olvides ir poco a poco, no debes estresarte.

El asintió mientras se aferró con fuerza de mi mano.

-yoconmer

Golpee mi frente de frustración. Quien sabe desde cuando no tienen una comida decente, sobre todo Aniel, sin lengua alimentarse no es trabajo fácil.

Ning- vamos, les pediré a las chicas que nos preparen algo delicioso.

Lo tome entre mis brazos y salimos del espacio sorprendiéndome el encontrar a tantas personas reunidas en el lugar.

Ning- y esta bienvenida?

Dije mientras bajaba a Aniel y le indicaba ir con Zamora.

El pequeño camino hacia él y se acercó a su oído susurrando algunas palabras, las cuales congelaron a Zamora, quien fijo su mirada hacia mi mientras se acercó corriendo y cayo de rodilla frente a mí.

Zamora- gracias, me dedicare hasta el día de mi muerte y en el más allá a protegerla señorita.

Ning- levántate Zamora, no quiero ver uno de mis hijos de rodillas, ya dije antes, nosotros seremos quienes se encarguen de protegerlos. Por ahora comenzaremos con un delicioso desayuno, ¿o ya lo hicieron?

Damián-no, ellos querían esperar su regreso y nosotros no podíamos dejarlos solos, ¿verdad?

Ning- es eso así?

Me gire para observar a Ren quien al notar mi mirada se acerca mientras arrastra la carriola.

Ren- esperaremos por ustedes mamá.

Ning- puede que tarde un poco más en ir por el desayuno, qué tal si van y llevan a Liam con ustedes, nosotros los alcanzaremos luego.

Ren asintió mientras distraía a Liam con el conejo, para que este dejara de estirar sus manitos en mi dirección.

Damián- nosotros nos encargaremos en este lado, mejor ve pronto.

Asentí agradecida e ingresé con Zamora al espacio.

Apenas cambio el entorno sentí que el cuerpo del pequeño colapsaba, lo atrape evitando que se desplomara al suelo y lo deje sobre la camilla. La temperatura corporal era alta, su respiración desordenada.

Preparé el goteo intravenoso y mientras este hacia efecto comencé a limpiar su cuerpo.

Para evitar moverlo demasiado corte la capa y el pequeño deshilachado pantaloncillo.

A medida que limpiaba su cuerpo innumerables cortes abiertos comenzaron a quedar expuestos, cuando los vi por primera vez note el lodo en su cuerpo, pero fue una atención fugaz, jamás imagine que este pequeño ocupara el lodo como vendaje para las heridas en su cuerpo, eso o fue con la intención de esconderlo de Liam y no preocuparlo.

Al asegurarme que la temperatura había disminuido, cargue su cuerpo aun inconsciente y lo lleve a la tinaja lavando por completo su cuerpo con hierbas. Luego lo envolví en una toalla y lo llevé de regreso a la camilla para comenzar la revisión.

Lo primero que hice fue anestesiarlo, no quería que despertara en medio del proceso y sintiera el dolor que vendría al retirar las capas externas de la piel dañada en los glúteos y parte del bíceps izquierdo. Estas parecían ser quemaduras y la supuración se había mezclado con el lodo adhiriéndose lo suficiente como para que aun luego del baño permanezca.