Caminamos por al rededor de la mansión Winter tomados de la mano, todo estaba yendo bastante bien, era muy bueno para ser real.
— Hace un poco de frío así que toma —Me coloco su saco sobre mis hombros—Así no podrás enfermarte
— Gracias —Y regreso a tomar mi mano, era tan cálida— Tu mano es cálida
— Um, la tuya igual —Seguimos caminado— ¿Que hay de tu madre? Dijiste que había venido, ¿Donde esta en estos momentos?
Por un momento me había olvidado de mi madre y mis primas— ¡Lo había olvidado!, ella debe estar....
— ¡Chicos! —Marco y Liana me había estado buscando— ¿Por que estan juntos?
— Ah....
— Bajaba del auto cuando la vi caminando por ahí con este frío — Regreso la voz seria de Taehyung, realmente cambiaba de parecer.
— Ah entiendo —Liana dijo —Rosé tu madre quiere irse
— Ah claro iré a despedirme entonces
Taehyung me sostuvo de la muñeca una vez Marco y Liana estaban a unos paso más adelante.
— ¿Um?
— Llegare por ti
Me solto y seguí caminado, que fue eso significaba que iba a ir a buscarme a altas horas de la noche o que iría iría día siguiente.
Aveces era muy confuso.
— Me alegro que hayan venido y espero volver a verla— La señora Kim se despedía de mi madre.
— Igualmente, me hubiera gustado conocer a su hijo
A caso mi madre y la señora Kim, la madre de Taehyung, habían estado hablado de nosotros, o solo de Taehyung.
Estoy por morir si madre se entera de las cosas que eh echo, ella estará muy decepcionada de mi.
— Las llevaré de regreso —Una vez Frédéric se ofreció mire nuevamente atrás donde Taehyung estaba mirando de mala gana a Winter— Vamos rose
Y subimos de regreso a lo lejos pude mirar a Taehyung quien subió a su auto y arranco detrás de nosotros.
— ¿Y ese saco? Se ve bastante caro —Jihyo metió sus narices
— Tienes razón
— Un amigo me lo presto, se lo devolveré en un rato
— ¿Ese amigo es uno de los chicos que me presentaste? — Mi madre preguntó en el asientó del copiloto, le asentí.
— Um
En un par de cuadras más seguí mirando por el retrovisor y en efecto el seguía detrás de nosotros pero deje de verlo hasta que mi mirada choco con la de Frédéric, quien no dejaba de sonreír.
— Puedes dejarnos aquí, el hotel está justo ahí— Frederic detuvo el auto, mi madre bajo y yo detrás de ella— Cuídate Rosé nos vemos en vacaciones.
— Um, ve con cuidado, te llevaría al aeropuerto pero tengo demasiada tarea de programación
— No te preocupes, tu concéntrate en tus estudios
Mis primas se despidieron de nosotros primero después mi madre quien volvió a llorar como la primera vez que salí de casa para venir a estudiar aquí, Australia.
Las tres volverán a casa en solo unas horas podría quedarme con ellas hagas de que se fueran pero quería evitar las preguntas de mi madre sobre todos mis amigos.