SOBREDOSIS •Timothée Chalamet•

Capítulo 7

Lee Miller

Era de mañana faltaba mucho para llegar íbamos en autobús.

- Solo quiero llegar a dormir— dije agotada

- Tendrás que comer algo primero— habló Timothée agarrándome de mi mano

Volteé con vista a la ventana vi mi reflejo en el me veía faltal unas leves ojeras con un rojo vago en mis ojos el cielo estaba nublado las calles húmedas producto de la lluvia.

Poco después sentí la cebeza de Timothée en mi hombro se había dormido una leve sonrisa se formó en mi rostro.

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Habíamos llegado lo primero que hice fue ir directo al baño unas náuseas se avecinaron en mí vomité en el interior de la taza.
No había comido nada aún, un mareo llegó al momento de querer levantarme.

Odiaba sentirme así, quizá sea el paso de efecto por Khat.

Me acosté un rato el suelo quiendo que el nareo y malestar se fuera busque entre mi bolsillo una pequeña tableta de vicodin, la tomé. Con dificultad me levante llegando hasta mi cama para tirarme encima. Timothée había salido por comida tardaría en llegar.

Por desgracia por más que quisiera dormir el sueño no llegaba mi cuerpo quería descansar más mi mente no lo permitía prendí un poco de hierba e inhale votando el humo por la ventana apesar de lo nuboso que este afuera la vista no dejaba de ser linda.

El sonido de la puerta al abríse sonó volteé la vista era él.

- Traje hamburguesa— sonrió

- ¿Para desayunar?— levante una ceja

- Casí es medio día Lee—

- Oh, no me había dado cuenta—

Timothée me tomo por los hombros llevó una de sus manos
hacía mí frente su ceño era fruncido.

- Estás con fiebre, necesitas descansar— besó mi frente

La hamburguesa a mi vista no se veía pepetitosa, pero debía comer algo Timothée por otra parte estaba hambriento.

- Tienes un poco de kapsu— lleve mis dedos a mis labios indicando el lugar

- ¿Dónde?— habló poniendo sus manos en su boca

Ansioso buco aquella mancha de kapsu no pude evitar soltar un leve risa me acerqué a él llevando mi dedo índice en la comisura de sus labios

- Listo— dije

- Hubiera querido que lo quitaras de otra forma— soltó

Un sonrojó se presentó en mis mejillas.
Llevó sus manos a mis meijllas acercándome a él por alguna razón me sentí nerviosa ante su tacto me aparte ligeramente de él

- Como vas con tu trabajo — dije cambiando de tema

- Me fui mejor por la historia — necesito inspirarme para escribir—

- Creí que harías todo cliché—

- Uno núnca sabe lo que pasará— sonrió de lado

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Estábamos en el campus Timothée pensó en el clima y lo maravilloso que era para una inscripción

- No entiendo el porqué me trajiste d enuevo aquí —

Estábamos en un banca en el campiea no tan seguro veíamos aquí, pero Thimothée insistía cuando recién lo llegue a conocer solo nos la pasábamos hablando o fumando un poco, claro eso era en época de verano

- Por compañia—

- Hace frío—

Me abrazó por los hombros nos encontramos sentados en una banca bajé mí visita a mis pies moviéndolos.

- Hay algo que quiero que sepas Lee— mencionó con nerviosismo

Me tomo del mentón haciendo que lo mirará posó su mano encima de mía una corriente eléctrica recorrió cada parte de mi ser ¿por qué era que me sentía así? es como si cuerpo supiese lo que estaba por venir

- Lee— oí que llamaron—

Volteé a ver den quien se trataba y era Tom se veía angustiado y algo enojado.

- Lee aléjate de él— me tomo del brazo

- ¿Qué haces?— Tom forse para soltarme

- Déjala.— oí a Timothée

- No tu déjala, aléjate de ella no le haces bien— reclamó

- Ambos no se hacen bien— se puso frente mío

La mirada de ambos eran retadora.

- ¿Cómo puedes saber eso?— preguntó irónico Timothée

- Es sencillo, solo debes mirarte—

- Me refería a lo de ambos— se acercó amenazante

- Vamos en vez de cambiar una droga por otra las están uniendo— se exaltóa los que fruncí mi entrecejo— No quiero decir nada más de lo que ya es obvio— suspiro— vamos Lee—

- No, vamos dí lo que insinúas— insistió

- Ven Lee— me tomo del brazo

Iba a marcharme.

- Solo espera Lee, espera a que él diga— no tuvo las agallas suficientes de decírte como cree que son las cosas— se exaltó

Tom se veía frustrado y Timothée por otra lado se empeñaba en hacer que Tom diga lo que tenga que decir ambos discutían apegados a su ideales. Voces, voces murmuraban solo escuchaba eso las voces de ambos discutiendo en una sintonia aguda y repetitiva un estruendo llegó a mis sentidos un pitido agudizo se presento era molesto junto a una presión en el pecho sin darme cuenta me encontraba tapandome ambos oídos y de mi boca salía mi lamentar tirada en el suelo encogiendome del dolor que sentía pronto el pitido se fue apagando siendo así también todos mis sentidos.