El día había transcurrido de forma lenta, y aún cuando había dormido por lo menos dos siestas en siete horas.
Ahora, en su segundo día sin Han, Minho no tenía ni idea de qué hacer exactamente. Había limpiado el salón, ordenado la cocina, quitado el polvo de su cuarto e incluso había intentado acariciar a Merengue más de una vez.
Y todavía quedaban seis largas horas por delante para, al menos, dormir plácidamente.
Aunque Minho no dormía en casa de Jisung, sí pasaba la mayor parte del tiempo allí. Cuando terminaba de encargarse de sus gatos, iba directo por el de Han.
Y justo en ese momento había ocurrido la misma situación. Ya se había encargado de abastecer las necesidades de Soonie y Dori, por lo que se dispuso a hacer lo mismo con Merengue. Cambiar la arena, darle comida, quizás chuches...
Pero como el gato no se dejaba tocar, descartó la idea de jugar a algo con él.
Pensó en darle una grata sorpresa de bienvenida al chico merengue con merengue, para variar su dieta.
Buscó en internet recetas de su gusto y al abrir un par de armarios le sorprendió la cantidad de harina y azúcar que se amontonaban en su interior.
¿Es que no comía otra cosa?
Minutos después, allí estaba él, confundido por la textura del mejunje que acababa de crear. Lo llamaría "Merengue Ilegal" si supiera las consecuencias que tendría en el cuerpo humano para cualquiera que lo probara. Pero ese no era el día para crear un nuevo virus mortal, así que tiró su intento de dulce a la basura.
—¿Merengue?— Preguntó luego de un rato sin verle.
Comprobó si se encontraba en su espacio de juegos pero no estaba allí.
—¿Merengue? ¿Dónde estás, pequeña bola de pelos?— Asegurar que Minho no se estaba poniendo nervioso sería mentir descaradamente.
Comprobó todas las partes de la casa y cuando dio por hecho de que, efectivamente, Merengue no se encontraba debajo del sofá, comenzó a entrar en pánico.
Corrió hacia el callejón apresuradamente pero al llegar no había rastro de ninguna huella felina.
Jisung le iba a matar.
No, es más, seguramente le daría un poco de ese merengue ilegal que había creado antes.
Y es posible que también le eche un mal de ojos que le mande directamente al infierno.
Merengue, ¿dónde estas?
🐾[🧁]🐾
—Mierda.— Maldijo cuando vio que Jisung le estaba haciendo una videollamada.
Probó en dejarlo pasar la primera vez, fingir que estaba ocupado y no se encontraba observando atentamente cuándo terminaba la llamada para poder pasar de nivel en Candy Crush.
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Entre dulces y Merengue || Minsung
FanfictionLee Minho era un simple chef doméstico incapaz de sentirse sedentario, trasladándose constantemente debido a su trabajo. Pero en una de sus mudanzas a Seúl conoce a un pequeño gato de pelaje suave y blando, casi comparable a un trozo de bizcocho. ...