Capítulo 23

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Puede un corazón roto sanar, sin mirar nunca más atrás, buena pregunta podré sanar algún día y aprender a vivir sin dolor.

Tome asiento a un lado de Wangji, la cena estuvo algo tensa el tío Quiren le gusta cenar en silencio, Jian Cheng no deja de mirar a Wangji con mala cara, este no provo la cena, Xichen estaba en otro mundo, después de un silencio sepulcrar fue Wangji el que habló.

-¿Xingchen crees que podamos hablar un momento?.

-¡Oh si claro! en cuanto termine de oír la práctica de musica de Jiang Cheng te parece.

-Si.

Wangji tomo mi mano en forma de agradecimiento, y curvando los labios ligeramente en lo que más que una sonrisa parecía sólo una mueca, la mirada de Jiang Cheng se centro en nosotros.

-Ya termine, si la clase es ahora mismo seria mejor, necesito seguir estudiando para el examen de mañana.

-Eso no es muy cortes de tu parte cariño Xingchen no a terminado de cenar.

-No se preocupen ya termine vamos Jiang Cheng te espero en el cuarto de música.

Vi como todo se levantaron solo quedamos Xichen y yo intente levantarme pero Xichen me sentó de una.

-Tenemos que hablar.

-¿Tu y yo de que tendríamos que hablar.

-Del hijo que me tienes quedar cariño.

Sentí arder mi cara pero de que demonios habla.

-Eso no va a pasar dijiste que encontrarías alguna manera para solucionar eso Xichen.

No es como que yo quiera un hijo contigo, Jiang Cheng hay una junta de consejo y ahí va a salir a relucir eso, dame ideas.

-¡Ideas! ¿porque no se lo pides a Guangyao? tal vez nos de la sorpresa y este esperando al próximo heredero Lan bienes de revolcarte con él o me equivoco.

-No no lo haces es cierto lo que dices, pero tal vez Song lan estaría encantado de prestarse para darte un hijo.

-¿Pero que dices?.

-No soy un idiota Jiang Cheng se muy bien que sigues en contacto con ese hombre.

-Hago lo mismo que tu entonces.

Lo vi levantarse de su silla y tomarme de la cara bruscamente estaba a escasos centimetros de mi nuestras miradas se cruzaron es que porque mi martirio tenía que ser tan bello.

-Te he pasado muchas Jiang Cheng no juegues con fuego porque te vas a quemar

Sentí un ligero beso en los labios me soltó y se fue dejandome más que confundido, me levante tan rápido que tunbe algunos platos.

-¿Jian Cheng no te hiciste daño?.

-No, deja te ayudo.

-Claro que no yo lo hago.

-Xue Yang acompáñame por favor.

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