𝗨𝗻𝗱𝗲𝗿 𝗟𝗼𝗻𝗱𝗼𝗻'𝘀 𝗯𝗿𝗶𝗱𝗴𝗲 ; Jack & Hércules

2 ; Cálido despertar.

Una agradable brisa que se coló por la ventana lo hizo abrir los ojos poco a poco, encontrándose de inmediato con las preocupadas miradas de Brunilda y Goll.

Hércules había despertado en la enfermería, sus recuerdos eran borrosos, pero no lo suficiente como para olvidar el resultado de su último combate.

——¿Cuánto tiempo.. estuve dormido? ——

——Una semana. ——Respondió la mayor, cruzándose de brazos mientras sus ojos parecían humedecerse poco a poco y su voz se quebraba. No se suponía que debía llorar, pero terminó haciéndolo de todos modos. ——Estaba asustada.. ——Confesó, Hércules tomó su mano y la apretó con fuerza, dedicándole una sonrisa como solo él podía hacerlo, ocultando detrás el inmenso dolor que le impedía siquiera sentarse sobre la cama.

——¿Cómo está Jack? ——Preguntó entonces, sus hermanas se miraron entre ellas, atónitas. ——¿Él está bien? ——Volvió a insistir al no recibir respuesta, una sola mirada bastó para que Brunilda entendiera la situación, y sin quedarle otra alternativa, le respondiera.

——Está recuperándose, al igual que tú.

——Quiero verlo.

——¿¡Q-Qué?! ——Gritó Goll, cubriéndose la boca segundos después. Hércules rió.

——Me gustaría visitarlo. Hermana Brunilda,¿Crees que puedas llevarme a su habitación?

La mayor de las valquirias suspiró con pesadez, asintiendo una vez con la cabeza a modo de afirmativa.

Un par de cuartos más allá estaba el humano, reposando mientras leía un libro. No esperaba compañía, nadie se había tomado la molestia de visitarlo a excepción de su valquiria, por lo que le tomó un par de segundos responder al golpeteo de la puerta.

Por el marco se asomó el héroe, en una silla de ruedas manejada por Brunilda.

——Querido Dios..——Suspiró Jack con sorpresa, sus ojos se habían abierto de par en par al verlo, tan radiante a pesar de que su estado claramente era todo lo contrario.——Debo decir que no esperaba esta grata visita.. ¿Cómo se encuentra? ——

——Jack.. es un alivio ver que estás bien. ——Habló él, impulsándose hasta quedar a orillas de su cama. ——¿Tus heridas están sanando bien? ——

Pronto el humano empezaría a sentirse confundido por tanta amabilidad. Un enorme contraste entre la mirada severa de Brunilda y la mueca alegre que el Dios le regalaba, casi como, si él fuese una luz única en el Universo.

Jack, que siempre había sido repudiado, por primera vez experimentaba una calidez extraña en su pecho, ¿Era una hemorragia interna? al parecer no era el caso. Sonrió suavemente, asintiendo. ——Estoy bien, thanks for asking, ¿Puedo hacerle la misma pregunta? ——

Hércules alzó su pulgar. ——¡Por supuesto! yo... ——Pero se calló en seco, Brunilda lo obligó con una sola mirada. Carraspeó nervioso, llevándose una mano tras la nuca.——Yo, eh...¿Crees que podamos hablar después? —— " Cuando estemos solos" quiso decir, no fue necesario mencionarlo. Jack comprendió a la perfección, por lo que no fueron necesario contestar verbalmente.

El héroe de Grecia alzó su mano, el destripador la tomó con cuidado. Ambos se dieron un cálido apretón de manos, una especie de lenguaje que pronto y sin darse cuenta, empezarían a desarrollar entre ambos.