𝗨𝗻𝗱𝗲𝗿 𝗟𝗼𝗻𝗱𝗼𝗻'𝘀 𝗯𝗿𝗶𝗱𝗴𝗲 ; Jack & Hércules

11 ; Determinación.

El eco tras el repentino golpe de la puerta se había escuchado durante varios segundos en la habitación. Ambos miraban hacia el frente, el primero en romper en ese momento el silencio fue Jack, sintiéndose tan responsable de lo que acababa de suceder que por poco duda de hablar. 

——Dear God...¿Se siente bien? 

——Sí, solo..  un poco conmocionado.

——Mi señor.. creo que quizá esta es una señal.

——¿Una señal?

——De que esto entre nosotros tiene que acabar. No puedo permitir que se enemiste con todo el olimpo.. solo por mi causa.

——Hey, Jack..no quiero que vuelvas a decir eso otra vez...¿Todavía no estás convencido de lo que siento por tí? ——Murmuró, agachándose frente suyo.

El inglés no ponía en duda los sentimientos del Dios, en más de una ocasión Hércules le había demostrado lo genuino de su afecto.. y era precisamente por eso,que resultaba tan difícil frenarlo.

——Lo estoy, usted sabe.. que yo lo adoro, de pies a cabeza.

——¿Entonces cuál es el problema?

——Sabe cuál es, lo sabe perfectamente..por favor, no trate este tema tan a la ligera.

——¡Es que es sencillo, Jack! no voy a permitir que te alejen de mí. Llevo siglos viviendo entre Dioses.. creí estar preparado para seguir haciéndolo, pero ahora me doy cuenta...——Inhaló, llevando sus ojos hacia el piso con cierta tristeza. ——Que prefiero morir habiendo experimentado este amor verdadero.. a vivir una vida eterna sin ti.

Y es que hasta ese momento, ninguno de los dos había hablado de un amor tan profundo. Ambos lo sentían, más, mencionarlo para un par de almas inexpertas resultaba arriesgado..bueno, Hércules lo hizo primero, inconscientemente, tan espontáneo y seguro de sus palabras que al percatarse, el corazón del humano dio un sobresalto sobre su pecho.

——Amor verdadero...——Repitió el albino, apretando sus labios. Una sutil sonrisa apareció en su rostro. No había nombre más adecuado,¿no es así? le hubiese gustado corresponder a sus palabras, sin embargo sin previo aviso y de un momento a otro su visión se había vuelto ligeramente borrosa. Parpadeó varias veces.. pero al cabo de unos segundos, las lágrimas empezaron a brotar sin control.

Jack no era el tipo de persona acostumbrada a desbordarse, mucho menos en llanto.. la última vez que derramó una lágrima fue cuando era apenas un niño.. precisamente, por la única persona que antes le había importado, su madre. Se llevó los dedos de ambas manos a sus empapadas mejillas, tocando asustado, sin poder creer lo que estaba pasando.

——Oh my...i'm so sorry. ——Musitó, apretando los párpados con fuerza para tratar de detenerse. Aquello solo pareció empeorarlo, pues un par de jadeos cargados de tristeza escaparon de su boca, entendiendo en ese punto..que era inútil tratar de detenerlo.

——¡J-Jack..! ¿Qué..? ——El héroe enmudeció, sin saber exactamente qué hacer. Sus enormes brazos se movieron con torpeza alrededor de su cuerpo, ¿Podía abrazarlo?¿Necesitaba espacio? la angustia lo hizo optar por la primera opción, atrapando su cuerpo con sumo cuidado, ofreciéndole su hombro para que secara sus lágrimas.

——Sé que a veces es..necesario llorar, pero.. me parte el alma verte así. ——confesó, enderezándose para poder depositar un beso sobre sus húmedas mejillas. La voz del pelirrojo lo reconfortó, permitiéndole entre sollozos, hablar.

——Nunca había experimentado.. tanto amor y una tristeza tan desgarradora al mismo tiempo..

——Jack.

——¿hm?

——No podemos escapar de esto..lo sé, pero quiero llegar hasta el final.

El silencio se hizo una vez más, apenas duró unos segundos, pero para uno de los dos pareció una eternidad. Una suave risilla hizo eco en la habitación, el rostro de Jack había recobrado su color. Solo Hércules era capaz de hacerlo. Es como si ese gigantesco hombre tuviese la habilidad de disipar todos sus problemas.

——Es usted..un Dios muy necio.

——También soy humano,¿no? ——Verlo sonreír lo hizo suspirar, tan embobado y al mismo tiempo conmovido, que terminó por tomar su mano sin pensarlo.

Jack entrelazó sus dedos, sabía que ya era hora de irse a casa. Continuar hablando en este momento posiblemente no los llevaría a nada, por lo que ambos optaron sin siquiera decírselo a pausar aquella conversación...al menos, hasta que la Luz volviese a hacerse.

Caminaron en silencio, no fue un trayecto incómodo. Para Hércules resultaba reconfortante tener al albino a su lado.. aunque Jack, por el contrario, se sentía todavía algo temeroso, pensando que quizá, alguien pudiese verlos.

Sin contratiempos habían llegado a la pequeña morada donde Jack se hospedaba. Hace un tiempo que optó por alejarse de las habitaciones dónde estaba la humanidad.. el ruido no le permitía leer en paz.. además de que, era más difícil encontrarse con el Dios.

——Descansa, Jack..——Se despidió, dejando un último casto beso sobre sus labios antes de alejarse.

El abino sonrió, contemplando dudoso, como el héroe se alejaba.

——¿Hércules?

——¿Sí?

——¿Desea usted...quedarse esta noche?