A TRAVÉS DEL TIEMPO

35. NO COMPARTO

Después del desayuno el sultán despidió a los pretendientes y a las concubinas al jardín para que hablaran y se fueran conociendo mejor, decidieron que Himiko fuera la prometida de Ochaco, Yosetsu de Setsuna, Sero de Mina y Jiro de Momo.

El cenizo por su lado se fue a platicar los asuntos con el comerciante a la sala de reuniones privadas junto con Eijiro, mientras que Izuku fue a la biblioteca a leer un poco además de que necesitaba un buen merecido descanzo, no pensó que quedar a cargo de un imperio tenía que estar de aquí para allá, escuchar cada una de las quejas de los súbditos y ser juez de barios tribunales donde algunos resultaban ser totalmente absurdos.

Afhife junto con dos guardias lo custodiaban mientras estaba sentado cerca de la ventana sobre un gran cojín mullio que se amoldaba a él además de tener uno más pequeño bajo sus pies descalzos.

- Mi sultana... no desea algún té o un aperitivo para acompañar su lectura? - pregunto uno de los criados que lo servían

- Si... me gustaría mucho una buena taza de té de menta... por favor - el sirviente hizo una reverencia y salió de la biblioteca

- Sultana... ahora que lo pienso... ya lo ha chequeado un doctor para saber como va el avance de su embarazo? - pregunto Afhife suavemente

- La verdad es que después de esa vez que casi tuve una amenaza de aborto... no me han chequeado... seria bueno que me hicieran una revisión ahora, no?

- Así es... si desea puedo mandar a llamar a algún médico para que venga revisar como va su estado

- Esta bien, ve... y llévalo a mis aposentos... me vienes a ver para ir - ella asintió y salió

Él siguió con su lectura hasta que el sirviente llegó con una bandeja con el té y unos panecillos de nuez con mermeleda de mora agridulce, agradeció los bocadillos antes de seguir leyendo, estubo todo tranquilo por una hora hasta que alguien entró y se acerco a él, el peliverde al notar la presencia cerca, alzo la mirada para ver quien era tapándose con la grata sorpresa de ver a la omega de esta mañana que intento ocupar su lugar.

- Que haces aquí?... que yo sepa el sultán dio la orden de mantenerte alejada de él y de mi - dijo poniendo el libro a un lado dejando el separador a la vista y mirando a la omega con duda

- Mi sultana... lamento haber aparecido de repente pero eh venido a hablar con usted de algo muy importante

- Que es lo que deseas hablar? - arqueo una ceja curioso por la tranquilidad de ella

- Bueno sultana... se que sera descortés de mi parte que le diga esto... pero... desde que vi al su majestad el sultán Katsuki... eh quedado totalmente cautivada por él... lo más que deseo es estar a su lado, sentirlo dentro de mi, tener a sus hijos... deseo estar con nuestro señor - dijo sonrojada a lo que el peliverde la vio como si se le hubieran salido los tornillos - Por favor sultana... déjeme estar con él sultán también

- No - fue la respuesta rápida que recibió la chica

- Que... porqué?! - vio que el peliverde tenia un semblante serio

- Porque yo no comparto lo que es importante para mí - ella apreto los puños al saber que técnicamente a la sultana no le agradaba su petición en lo más mínimo - Además de que esto... es muestra de que su majestad no puede tocar a otros que no sea yo - movió el cuello de su vestido mostrando su perfecta marca de emparejamiento con orgullo, vio como la chica quedó cin la boca abierta por eso - Kacchan es mio y nadie lo apartara de mi lado, eso tenlo por seguro... así que deja de ilusionarme con un alfa que jamas se fijara en ti - se pudo de pie y miro a la omega fijamente - Así que por tu bien... no te quiero cerca de Mi esposo - en eso entro Afhife que se sorprendió al ver a la chica ahí, pero decidió ignorarla e hizo una reverencia